El segundo viaje escolar se acerca

651 109 43
                                    


Y finalmente, el día del examen llegó. Era el día más estresante para la mayoría de estudiantes del colegio por no decir todos, las propias quintillizas que aunque sabían que no tenía importancia, decidieron dar su mayor esfuerzo a la par que su tutor, Kujo Jotaro.

Apenas al llegar al salón de clases, se sintió algo de tensión en el ambiente pero algo como esto, no iba a afectar en absoluto al estoico Jotaro que tomó asiento a un lado de su mejor amigo que lo saludó con amabilidad.

—Según lo que me contaste, debías entrar en el top diez mejores del país, ¿no? ¿Crees qué lo lograrás?

—Por supuesto. ¿Por quién me tomas, Kakyoin? ¿Tú crees que podrás superarme? —Jotaro miró con alegre competitividad a su pelirrojo amigo que tan solo sonrió.

—Ya lo veremos.

—Por favor vacíen sus escritorios y tomen asiento —indicó el profesor observando como los alumnos seguían sus instrucciones y comenzaban a repartirse los exámenes—. No volteen la hoja hasta que dé la señal. Bien, ahora pueden comenzar el examen de simulacro nacional.

Luego de eso de ese día tan agitado, Jotaro lo logró. Las bebidas energéticas que compró a la hora del almuerzo rindieron frutos y le brindaron la energía suficiente para resolver todas las pruebas sin dormirse. Gracias a su astuto pero sencillo plan, consiguió la posición número uno siendo la mayor proeza estudiantil que logró hasta la fecha.

Y para darle el aviso de haber recuperado su trabajo oficialmente, Jojo fue al hogar de las Nakano para informarles sobre su situación laboral. El chico subió por las escaleras exteriores llegando al segundo piso que era el único que había y en mitad del camino, una voz conocida lo llamó.

—¿Kujo-kun? ¿No era ese el auto de papá? —preguntó Itsuki extrañada por lo que sus ojos habían visto.

—Lo era, su padre me trajo aquí para informarles que recuperé el trabajo —respondió sin mas, como si fuera un resultado ya calculado por él.

Al instante en que la pelirroja escuchó esa increíble noticia para ella y sus hermanas, una sonrisa de alegría y felicidad se formó sobre su rostro.

—¡Finalmente tus logros han sido reconocidos! ¡Felicidades! —Itsuki no pudo contenerse y abrazó con fuerza al joven inexpresivo.

Itsuki y Jotaro terminaron su breve conversación e ingresaron apartamento de las chicas que recibieron alegremente al tutor pero él lo ignoró rápidamente.

—¿Qué demonios es todo esto? —cuestionó el muchacho notando decenas de cajas por todo el suelo.

—Estamos haciendo una limpieza profunda en todo el apartamento —respondió Yotsuba muy alegre la cual iba cargando una caja.

—Había venido para corregir los errores de sus exámenes pero viendo que están ocupadas, me voy.

—¿No nos quieres ayudar? —preguntó Yotsuba.

—No.

—¡Espera! ¿Te vas tan pronto? —reclamó Nino algo desanimada.

—Sí.

Jojo se dispuso a retirarse del hogar de las chicas. El joven abrió la puerta y comenzó a marcharse, pero sintió una mano sujetando su brazo. Naturalmente, ladeó la cabeza para ver a quien lo llamaba.

—¿Qué quieres, Itsuki?

—Tengo que contarte algo, es un secreto —dijo la chica en voz baja, saliendo de su hogar para hablarlo a fuera con él—. Ya no puedo callarme esto más tiempo...

Un tutor muy serioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora