Nuevo comienzo

1.3K 68 2
                                    

Mar

Miré la ventana de mi apartamento, se veía todo el centro de París, hacia frío, así que fui al armario a por una rebeca, "joder" pensé al ver que solo tenía esa, la amarilla con capucha que metió Samuel en mi maleta el último día de campamento.

Al ponérmela sentí un escalofrío por todo el cuerpo, seguía oliendo a él, y mira que la había metido a la lavadora muchas, muchas veces, pero en vano, su olor permanecía allí... Cerré los ojos y me empezaron a venir recuerdos de aquel campamento de verano en Noosa Shire, todo me parecía tan, pero tan lejano... Aunque solo habían pasado dos años...

Sí, ya hacía dos años que había acabado mi "relación" con Samuel.

Sacudí la cabeza cuando me tocaron el timbre de mi apartamento, me sequé rápido las lágrimas y abrí la puerta:

—¡Adrien!

Me abrazó fuerte y me dió un beso en la frente.

— ¿Estabas llorando?

—Eh... No, no...

—Venga vístete que vamos a dar una vuelta...

Me esperó en la sala de estar mientras intentaba cambiarme lo más rápido posible, cuando acabé salimos de mi apartamento.

Caminamos un poco, llegamos al Café Odilon y pedimos comida para llevar... Estaba todo riquísimo.

Después de comer, cogimos el metro y fuimos hasta el Louvre. En un mes estaríamos desfilando en su interior con todo lo que habíamos confeccionado anteriormente en la carrera de diseño y moda, la cual Adrien y yo estudiábamos.

Conocí a Adrien el primer día que pise la universidad de diseño y moda, estaba perdidísima con el idioma, el lugar, y todo... Entonces este me ayudó a encontrar mis clases y después me invitó a un café. En poco tiempo se convirtió en un apoyo fundamental aquí en París, aparte era lo más parecido que tenía a una familia.

Caminamos un rato más, para después sentarnos en el césped que había un poco más atrás del Louvre.

—¿En qué piensas? —Me dijo mirándome a los ojos.

Tenía su mirada penetrante clavada en la mía, lo que me hizo tragar saliva...

—En que en un mes estaremos desfilando en el Louvre y que hace menos de un año ni se me pasaba por la cabeza llegar hasta aquí...

—Todo saldrá bien, hazme caso...

Desde que había llegado a París no había tenido oportunidad de entrar a mirar el Louvre, ni hacer de guiri y cotillear por aquí... Entre trabajos, las noches que me quedaba acabando de confeccionar, no tenía tiempo para conocer París...

—Adrien...

—Dime...

—Me gustaría hacer un poco de turismo por la ciudad...

—Pues mademoiselle vámonos...

Se levantó y me tendió la mano para ayudarme a levantar.

Algo más que un amor de verano [#2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora