¿Explicaciones?

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Mar

Distrayendome con el lápiz y con la mente en todas partes menos en lo que explicaba la profesora me pase la primera media hora de Historia de Arte, hasta que el portero tocó la puerta, cosa que hizo que aterrizase en la tierra.

—Mar Anderson, esto es para usted... —Dijo con dos ramos pequeños de flores, en una mano llevaba uno de rosas y en la otra de tulipanes

Ay la virgen, ¿y esto?

—Muchas gracias... —Dije notando como me estaba empezando a sonrojar

—Lee las notas Mar... —Me dijo en voz baja— Perdone la interrupción mademoiselle...

—No se preocupe y a ti Mar, joder vaya chico o chica te has buscado, es un precioso detalle... Pero prosigamos con la clase... —Contestó riendo y mirando los preciosos ramos.

Sonreí instantáneamente al pensar en él, a poca gente le había contado cuáles eran mis flores favoritas, y Samuel estaba en ese "poca gente" a parte tenía la corazonada que había sido él, y mis dudas se aclararon tras leer la nota.

"Si me ves por alguno de tus pensamientos, abrázame, te echo de menos..."

Decía la nota de las rosas, cosa que, cuando acabé de leerlo se me encogió el corazón...

"Tengo que hablar contigo, necesito verte rubita..."

Decía la otra nota en el ramo de tulipanes, a lo que pensé en lo que podría ser perfectamente:

¿Las explicaciones?

Empecé a sudar, así que levanté la mano y pedí ir al lavabo, necesitaba echarme un poco de agua en la cara, no era fácil pensar que seguramente hoy recibiría las explicaciones que merecía, dos años después...

"Hoy seguramente es el día Mar..." Pensé echándome agua

Sacudí la cabeza y decidí volver a clase, con la mente puesta en Samuel...

—¿Todo bien señorita Anderson?

—Si, si, disculpe...

—Está bien, vuelva a su sitio...

Dennise y Adrien me miraron preocupados, a lo que yo les asenti, me senté en mi sitio e intenté prestar atención a lo que quedaba de clase, aunque nada más mi vista se desvió a los ramos que tenía en mi mente, fue como la aguja que pinchó mi burbuja mental. Aunque por suerte la clase acabó antes de lo que yo pensaba, mientras acababa de recoger, siendo la última como siempre, Dennise y Adrien viendo flechazos a mi, aunque su relación seguía estando colgando sobre un hilo, seguían estando como si nada cuando estaban conmigo, cosa que agradecia.

—Te esperamos fuera tardona... —Me dijo Dennise bromeando

—No te olvides tus preciosos ramos.—Intervino Adrien

Les sonreí y acabé de meter el Ipad en el bolso, cogí mis ramos y una vez me despedí de mi profesora, salí pitando leches para que Adrien y Dennise no me esperasen tanto...

Estaban sentados en el banco enfrente de la universidad y nada más verme se levantaron.

—¿Nos tomamos un café en casa y os lo cuento?

Me sonrieron y asintieron, cogimos el metro y en poco más de diez minutos estábamos en mi casa.

—Bueno... —Dijo Dennise queriendo ir al grano

—Déjame que ponga a remojo los ramos por favor, y ahora os cuento...

Me fui a mi cuarto, cogí los jarrones y los rellené de agua, después quité las notas para que no se mojasen, las guardé en los cajones de la mesita de noche, puse los ramos en los jarrones y volví con Dennise y Adrien.

—Bueno, empezamos ya o, ¿no?

—Voy a empezar a hacerlos, id yendo a la terraza si queréis, enseguida vengo...

—Claro...

Empecé a hacer los cafés, me temblaban hasta los pies, acabé de hacerlos y se los serví en la terraza. Me senté con  ellos, fui la primera en pegarle un sorbo al café.

—A ver... —Dije por fin

—Esos ramos eran de Samuel, ¿no?

—Sí.—Le contesté a Dennise sonrojandome

—Samuel es una de las pocas personas que sabe cuales son mis flores favoritas... Al principio pensaba, no sé, será casualidad, pero había una nota  en cada ramo y mis dudas se aclararon...

—¿Qué decían?

—Solo si quieres claro... —Me dijo al ver que no contestaba

—Que me echaba de menos y que quería hablar conmigo...

—La virgen —dijo Dennise — ¿Tienes palomitas?

Será sin vergüenza AJAJAJA

—Si que tengo, esperarte...— Le contesté riéndome

Fui a la cocina, las puse en el microondas y esperé un par de minutos, después volví a la terraza.

—Aquí las tienes cotilla...

—¿Por dónde íbamos? —Me dijo empezando a comer palomitas

—¿Tu quieres hablar con el Mar? —Contestó Adrien

Eso sí que no me lo esperaba

—Yo, eh...

—Mar, si o no.

—Eh... No... Bueno si, si quiero que coño, claro que quiero hablar con é.l

—¿Entonces?

—No sé, es difícil...

—¿Mar?

—Dime Dennise...

—¿Qué sientes por Samuel?

—Siento que hay algo que no me deja separarme de él, aunque lo intente, míranos con todos los lugares que había en el mundo, estamos aquí los dos, en París, dos años después.

—Como la leyenda del hilo rojo...

Sonreí mentalmente tras la respuesta de Dennise, así que me arremangue un poco la manga y enseñe el hilo rojo que había en mi muñeca, la que hacía referencia a esa leyenda, la pulsera que tenía con samuel

—Esta es la pulsera que tengo con Samuel desde el campamento... —Dije tocándome, cosa que hizo que se me removiera todo por dentro

—La sigues llevando...

—No me he atrevido a quitarmela, y él tampoco...

—Entonces está todo claro Mar... Ves, corre y habla con él...

—¿Si? Si, si voy, ahora me cambio.

—A mi me gustaría hablar contigo Adrien...

—Entonces nosotros nos vamos y te dejamos que te cambies, ya hablamos, ¿vale?

—Vale...

Una vez Dennise y Adrien se fueron, corrí a ducharme, y a ponerme un poco decente, que seguía con mis pintas de la universidad. Me miré al espejo y asentí.

Era el momento de ir hacia su casa.

Me dirigí al metro, llegue muy justa. Me puse mis auriculares y mientras sonaba I hate u, i love u

feat. Olivia O'brien.

Llegué a casa de Samuel en poco más de diez minutos, trayecto que se me hizo eterno, "tranquila Mar... Tú puedes..." Me repetía mentalemnte, una que estaba  en su portal entre, la puerta estaba abierta, subí hasta su piso y toqué el timbre.

No tardó en abrirme, me conocía perfectamente, sabía que esas notas y los ramos habían tenido efecto sobre mi, y que iría a su casa. Y efectivamente así fue.

—Has venido... —Me dijo mientras le brillaban los ojos

—Claro que he venido, Samuel...

Algo más que un amor de verano [#2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora