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Las revolucionarias hormonas de Louis no eran lo único que estaba alterando la tranquilidad en Villahermosa, ya que la última semana de vigencia, en el acuerdo de sumisión que mantenían William y Liam, estaba siendo muy distinta para ambos implicados.

Mientras el modelo ojimiel estaba más calmado y hasta feliz, tras haberse reconciliado con Zayn, el fotógrafo estaba más alterado, debido a que la relación de Edward y la joven empresaria parecía profundizarse por momentos.

Sin embargo, la realidad de eso era otra, ya que aunque Taylor y el gemelo se llevaban realmente muy bien y se atraían mucho, con los días se habían dado cuenta que lo suyo no funcionaría y habían decidido ser solo amigos.

Aún así, salían muy a menudo a cenar y al teatro, al cine y fiestas como pareja pues la joven estaba harta de que su padre le presentase a más pretendientes y tener al hermoso modelo como aliado, era una muy buena escusa para que este lo dejase tranquilo por un tiempo.

Liam por su parte, estaba así pues había acordado con Zayn que pronto estarían juntos, luego de jurarle que lo amaba y aclararle que no era prostituto, aunque si que tenía un secreto, el cual no podía revelarse, además de que debían mantener lo suyo oculto.

Al morocho no le había quedado otra que confiar en el joven modelo, a pesar de que por la cabeza le estaban pasando mil y un pensamientos sobre lo que el ojimiel podía estar ocultando.

La verdad, era que él tampoco le había revelado el porqué lo creía un prostituto, ya que había visto los juguetes sexuales y la sangre, en el día que se había colado en la habitación de hotel pues luego de haberlo tenido por fin entre sus brazos, ya no permitiría que nada le impidiera seguir amándolo y mucho menos perderlo.

El fotógrafo, sin embargo debía su irritabilidad, la cual aprendía con cualquier minucia a sus deseos irrefrenables de obtener al castaño y eso poco a poco estaba haciendo que se olvidase de dónde estaba y los modales que debía guardar.

Por ello, había llegado a tener graves consecuencias en la agencia, ya que había perdido los nervios en varias ocasiones con los modelos y clientes, por lo que el dueño finalmente decidió prescindir de sus servicios durante un tiempo.

Frustrado y sin trabajo, William solo hacía pensar y maldecir a Edward, por tenerlo así, ya que no entendía que podía tener este para hacerle desearlo tanto.

Ni siquiera el tomar a Liam en numerosas ocasiones y hacerle todo lo que se le había ocurrido, yo no lo había conseguido calmar.

(...)

Sara, la doncella que acostumbraba a limpiar la habitación del fotógrafo fue con ropa para guardar en el armario, mientras aprovechaba que este se había levantado e ido a darse una ducha.

Tras hacer su cometido, esta reparó en que una de las maletas de William estaba sin guardarse y como no tenía constancia de que este viajaría a ningún lugar, se dispuso a guardarla.

De repente, el fotógrafo salió del baño para coger su móvil de la mesilla, ya que había recordado que tenía que hacer una llamada importante, entonces al verla este se enfureció perdiendo el control de nuevo.

...-¡Suelta eso!, ¿Qué demonios crees que estás haciendo?-Le gruñó corriendo a sacarsela de las manos

-Oh disculpe, señor, la vi aquí fuera e iba a guardarsel...

-¿Quién te dijo que tocases mis cosas?- volvió a gritarle interrumpiendola-... ¡tú solo tienes que limpiar y punto!

-L-Lo siento, pe-perdón.

-¡Vete de aquí!, ¡salte!, ¡Déjame solo!

Esta asintió muy afligida.

-S-si, lo s-siento, lo si-siento mucho.

Rápidamente la doncella salió de la habitación muy impactada, cuando justo en ese momento el menor de los gemelos Styles pasaba por el corredor camino al comedor común.

-¿Qué ocurre Sara?, pareces haber visto un fantasma.

-Oh joven, por favor no me despida.

-¿Por qué haría una cosa así?

La mujer suspiró entristecida.

-Bu-Bueno es que su invitado, el señor William se molestó porque vi una de sus maletas fuera del armario y quería guardarla.

-Esta bien, tranquila no es para tanto, solo fue un mal entendido.

Esta negó.

-Seguro que le dirá que me despida pero no lo haga, por favor joven... le juro que yo creí que era para guardar... él está realmente furioso.

Edward asintió y le tocó el hombro.

-Anda, olvidalo y sigue en otra habitación, yo hablare con él.

-Gra-Gracias joven.

Tras irse esta, el castaño se quedó muy intrigado pues la actitud del fotógrafo desde que lo conocía era muy extraña y empeoraba por momentos.

-¿Qué demonios haces William?, ¿Quieres que mi familia te deje en la calle?- preguntó pensativo-...¿Y si está pensando en irse sin decirme nada?...no, no creo que eso sea posible y ahora mucho menos que ya no tiene el trabajo en la agencia.

Finalmente este siguió su camino, aunque no dejó de pensar en ello, por lo que cuando el fotógrafo bajó y se sentó a la mesa para desayunar junto a los demás, el castaño aprovechó para indagar.

-Me encontré con Sara en el pasillo, estaba algo nerviosa, al parecer le gritaste, ¿Que pasó?

William se tensó.

-Solo fue un mal entendido.

-¿Acaso hizo algo que no era su cometido?

El fotógrafo resopló.

-No, todo está bien.

Edward frunció el ceño pues a pesar de las palabras que salían de la boca de este no eran alarmantes, su actitud si lo era.

-¿Piensas irte a alguna parte, William?-habló entonces Harry.

Este lo miró con extrañeza.

-No, ¿De dónde sacas eso?, además, ¿A dónde demonios iría?

-Entonces ¿por qué sacaste tus maletas?-Volvió a hablar el modelo ojiverde.

El cubierto que estaba en la mano del fotógrafo se le cayó de la mano, chocando con el plato.

-Oh ¿Ya nos abandonas?- preguntó Off entrando en la estancia y mirándolo con interés-...Avísale a nana, es muy buena haciendo las maletas.

William se levantó repetidamente.

-L-Lo si-siento, iré a descansar a mi ha-habitación, no me e-encuentro muy bi-bien-balbuceó muy nervioso-...pe-permiso.

Los chicos se miraron con confusión ante la extraña actitud de este.

-¿Acaso he dicho algo malo?-cuestionó el piloto.

Niall, Harry y Josh se encogieron de hombros y siguieron desayunando, hasta al poco rato, el castaño se levantó también, aún sin terminar.

-¿A dónde vas tú, ahora?-preguntó su hermano-...apenas has comido nada.

-Ya no tengo más hambre... emm, necesito comprobar algo.

El modelo ojiverde se fue camino a las escaleras con intención de hablar con el fotógrafo pero por la ventana del recibidor, este pudo ver que el mayor acababa de salir fuera de la casona y se estaba subiendo a su coche.

-¿No era que estaba mal?, ¿A dónde demonios se va?-resopló Saint con molestia-...Sé que escondes algo, William Austin y ten por seguro que voy a descubrir que diablos es.

.....

😱😱😱😱 Esto está que arde, ¿No creéis?

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57. «Amigos», Larry Stylinson, Ziam, NiallJosh, Niallshawn, Omegaverse TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora