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Gulf mordía sus uñas y su respiración se había tornado agitada. 

Tenía miedo. Demasiado miedo.

El bajito a su lado le acariciaba la espalda para mantenerlo tranquilo, Earth tenía su cabeza apoyada en las piernas de Gulf, el chiquillo sabía que su mayor tenía cierta debilidad hacia él y de alguna manera mantenía un poco más el control. Gun jugueteaba con sus dedos en un afán por dejar de pensar en las cientos de cosas negativas que lo hostigaban.

El doctor se había marchado hace veinte minutos y aún no volvía.

Rápidos pasos llamaron la atención de los chicos en el cuarto, la puerta se abrió rápidamente y entró con una expresión asustada el aún esposo de Gulf, junto a sus dos amigos.

-¿Qué haces aquí? -preguntó el tembloroso Gulf.

Gun y Off cruzaron miradas, casi hablándose entre ellas. Gun tomó del brazo a Prem y le hizo una mueca a Earth para que saliera de igual manera, sin notar la expresión de asombro que traía el menor

Boun y Off salieron de inmediato.

Earth y Mew se miraron por unos instantes, pero no era momento para preguntar nada, así que el menor sólo salió. 

Los esposos quedaron ahí en la habitación, mirándose. Gulf no entendía la razón del moreno para estar ahí.

-¿P-Por qué? -volvió a preguntar el menor.

-Cari... -se interrumpió a sí mismo para corregirse- Gulf; me dijeron que Natasha se puso mal.

Gulf desvió su mirada. ¿Qué le importaba que Natasha se haya puesto mal? No quería que Mew fingiera interés en su niñita.

Abrió la boca para hablar, pero se escuchó un ajetreo fuera de la habitación y seguidamente, se abrió la puerta.

Do Kyungsoo estaba serio, no traía esa sonrisa con la que entró hace casi media hora. Gulf se quitó las inyecciones, después de todo ya le dado el alta, se acercó al doctor con bastante miedo de lo que su mirada podría significar.

-Doctor... ¿Cómo está mi bebé? -preguntó Gulf.

Kyungsoo mordió su labio inferior y bajó la mirada. 

Jamás nadie podría explicar lo que sintió el menor en ése momento, sus manos se sintieron frías y húmedas a la vez. En su pecho algo sintió romperse.

-Médico. ¿Cómo está mi bebé? -volvió a preguntar, esta vez con su voz quebrada. Otra vez no recibió respuesta, entonces, ya cayendo en llanto golpeó el pecho de Kyungsoo- ¡¿CÓMO ESTÁ MI BEBÉ?! ¡¿QUÉ SUCEDIÓ?!

El médico tomó una gran bocanada de aire, los golpes de Gulf no tenían fuerza y ​​sólo se limitó a sostener sus brazos.

-Tuvo otro paro cardiorrespiratorio y... -pausó una milésima de segundo- no lo soportó.

Gulf abrió su boca y bajó la mirada.

A veces la vida puede ser tan injusta. Natasha ni siquiera aprendió a decir papá y ya se había ido, ni siquiera pudo ser arrullada por los protectores brazos de sus progenitores. 

Se marchó, llevándose con ella una parte de sus padres. Su vida ya no se balanceaba en un hilo. Natasha había vuelto a ser un angelito, el más hermoso. 

El llanto en ese cuarto era desgarrador. Gulf pataleó y lloró a cántaros, porque no pudo conocer los ojitos de su bebita. Porque jamás conocerá su voz. Porque siente su corazón hacerse añicos. 

Nadie podía consolar su incesante llanto, ni sus amigos, ni su esposo. 

~ o ~

La mirada de Gulf se mantenía fija en la nada, sus ojos sólo divagaban por los rincones, pero sus pensamientos no estaban ahí. Quería convencerse de que podría ser otra pesadilla y que al despertar, le dirían que Natasha estaba bien y que era una nena muy fuerte.

No importaba cuanto se la pasara mirando a su alrededor y cerrara sus ojos, su realidad era esa. En su realidad se sintió con una gran herida en el pecho, ardiendo, quemando y profundamente doliendo. 

Ya no vestía la bata del hospital, sus mejores amigos prácticamente lo vistieron

Boun y Off optaron por llevarse a Mew de ahí. Para ellos también fue una dolorosa noticia, pero sabían que Gulf no se encuentran para nada bien y podría incluso aumentar su rechazo hacia el moreno.

Tenían mucho de qué hablar, aún hay cosas que aclarar, pero ése definitivamente no iba a ser el momento.

A la receta que antes le había el doctor Kyungsoo, se le sumaron algunos antidepresivos, aunque el hombre ahora ya no hablaba directamente con Gulf, ya que éste no lo estaba escuchando.

Prem se aseguraba de guardar de tomar anotaciones mentales a algunos datos extras que le dio el médico, Gulf estaba hecho un ovillo entre los brazos de Gun, quien también tenía sus ojos hinchados y acariciaba con mucho cuidado la espalda de su menor.

Earth estaba sentado junto a los mayores y miraba sus manitas entrelazadas, había algo dentro de él, una incomodidad, un mal sentimiento. Pensó en su hermana mayor, de alguna manera dedujo que algo tenía que ver ella en todo esto. Mew se había mostrado demasiado enojado con Carolina, el embarazo de Gulf se había adelantado aun cuando él se cuidaba demasiado. 

Frunció el entrecejo. El jovencito de diecisiete años no tenía esa mirada dulce que mostró desde un principio, más bien, se veía enojadísimo. 

Se levantó, se acercó con mucho cuidado a Gulf y besó su frente, le prometió que iría a verle al día siguiente y salió del cuarto.

Tenía algo importante que hacer... 

Como una estrella MewGulf FinalizadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora