Querida Hermana. ✄ Jungkook

~1~ .Biología.

Desde que el famoso empresario Lee Byung, se comprometió con Kim Hyang, ama de casa y mujer promedio, la vida les ha cambiado completamente para bien.

¿Pero alguien se ha puesto a pensar en sus hijas? Para presentarlas en breve...

Lee Iseul. Caprichosa, egoísta, manipuladora, femenina. Su madre la abandonó al cumplir el primer año de vida.

Kim Ree. Dulce, tímida, y algo ilusa. Su padre murió de cáncer cuando ella tenía 6 años.

Ambos padres al conocerse, se enamoraron. Llevando una relación hasta el matrimonio. Iseul siempre le fue fría a su hermanastra desde aquel momento. Para ella, Ree tiene todo lo que pida, y a todos a sus pies. Ree quiso integrarse a Iseul, a pesar de su egoísmo; cosa que no le ha salido bien.

Pero esta 'rivalidad' empieza el día en que Ree conoce a Jeon Jungkook.
Compañero de clase en Biología.
Es inteligente, y sobre todo, amigable.

Jungkook ha estado enamorado de Iseul, (quien no ha mostrado ningún tipo de interés en él) desde la escuela primaria, así que al ver la oportunidad anhelada en Ree, ya que es su hermana, decide acercarse a ella. Proponiéndole que le ayude con Iseul. Ree, viéndolo tan ilusionado, acepta.

¿A que tipo de extremo pueden llegar dos hermanastras por un chico?

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-¡Ya es tarde!- gritó desde la cocina. Ree terminó de acomodar el aburrido uniforme, para darle otra mirada rápida al espejo. Sonrió. Este nuevo ciclo escolar será diferente; pensó.

Bajando las escaleras, se podía apreciar de lejos una adorable imagen familiar.

Iseul desayunando tranquilamente, Byung, y Hyang hablando mientras compartían risas con tazas de café entre las manos.

Desde hacía casi 4 meses, las pequeñas familias Lee y Kim se habían unido, y las adolescentes de 17 años cumplidos tenían que aprender a convivir. Algo completamente estresante para Lee Iseul.

-Buenos días.- Saludó y todas las miradas se posaron en ella.

-Hija, ¿has dormido bien?- Hyang preguntó con tono cariñoso.

-Espero que sí.- Byung asintió acomodando sus gafas.

-Sí, lo hice.- Sonrió sin mostrar los dientes. -Buen día, Iss.- Dirigió atención a su hermanastra, que se encontraba completamente perdida en el tazón de cereal.

-Te he dicho que mi nombre es Iseul. Deja de llamarme así.- Dijo fría.

Byung negó con la cabeza.
-Ah...- Se levantó lentamente. -Es... Hora de ir a la escuela. ¡Yo las llevo! Ree, te encantará tu nueva escuela, te lo aseguro.

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-¡Buen día a ambas! Y Ree... Hablé especialmente de ti con la directora ayer. Me dio estos datos.- Byung le tendió un montón de hojas cuidadosamente organizadas y engrapadas. Seguido de eso, se despidió, arrancando el auto para regresar a sus actividades.

Ree observó a Iseul, que mantenía el ceño fruncido mientras caminaban juntas a la entrada de la escuela.
Fue todavía un poco más sorprendente, cuando se relajó al ver a alguien.

-¡Sookie!- Iseul gritó, para correr a los brazos abiertos de Sook, su mejor amiga. -¡Espero que nos toque juntas este año!- Exclamó.

Ree sintió un poco de frustración al verla tan feliz. Piénsenlo, momentos atrás, le dedicaba miradas fulminantes, y ahora sonreía entre el abrazo de su amiga. Decidió seguir con su camino a pesar de no saber a donde iba.