Roberto y Juan llevan una relación de un par de años, pero un día Juan se reencuentra con un hermoso amor. El mejor amigo de ellos, Diego Balsa se da cuenta del daño que le hace Juan a Roberto y promete cuidarlo.
"-Y si te busca a las cuatro y veint...
La fiesta en la casa del streamer uruguayo, BarcaGamer era la mejor de todas.
Todos estaban borrachos y bailando excepto Diego y su amigo Roberto.
—¡Feliz cumpleaños! — hablo su amigo Víctor, miro a Roberto —Por ser tu cumpleaños, te tenemos una sorpresa, siéntate en esa silla y tapate los ojos.
—¿Los ojos? — Diego obedeció a su amigo, y se colocó una venda.
Su amigo Víctor acerco a Roberto a Diego.
—Recuerda, te doy mil dólares por lo que le hagas— susurro Víctor en el oído de Roberto.
El chico mexicano se acercó a Diego, junto sus frentes, Roberto se maldecía una y otra vez. No sabía si besarlo o rechazar el dinero que le daría Víctor. Se acerco lentamente a los labios del uruguayo besándolo de una manera lenta hasta que sintió la lengua de Diego rozar con la comisura de sus labios.
Su amigo profundizo el beso, sintió las manos de Diego en su cintura, Roberto se alejó un poco y miro a Víctor, este le pago el dinero. Diego se quitó la venda.
—¿Quién me beso? — nadie respondió, miro a Roberto el mexicano se tensó por la mirada tensa y cargada de lujuria de su amigo.
—No te diremos wey, era tu sorpresa— Diego los miro y soltó una carcajada.
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—Entonces, si te gusta ¿porque no le dices? — Diego miro a Grady y se encogió de hombros.
—Porque no creo que me corresponda.
—No lo sabrás si no le dices.
—¡Juan! — todos miraron al mencionado.
—Te pago lo que quieras a cambio de que seas novio de Roberto — un Hasvik ebrio se dirigió hacia Juan.
—Hell Yeah— Juan estaba ebrio así que todo le parecía buena idea. Grady miro a Barca y este solo negó.
—¡RobertoCein! — el pelinegro se dio la vuelta y vio a sus amigos.
—¡Mande! — contesto, Juan se acercó a él y se arrodillo.
—Roberto Sebastián y lo que siga después de eso, desde hace un tiempo me fije que siento algo por ti que no puedo ocultar, y quería hacerte una pregunta, ¿Quieres ser mi novio? — el pelinegro miro a todos lados en busca de celulares pensando que era una broma, miro a Diego.
—¡Si! — contesto Roberto, Juan se levantó y beso a Roberto tomándolo de la cintura.
—Te lo ganaron— Grady miro a Diego.
—Que te valga madre— Diego se levantó molesto del sillón y salió de la casa.
No era mentira que amaba a Roberto, amaba lo tierno que era, como se dejaba crecer su cabello y este se pegaba en su frente, como se pintaba las uñas de una forma detallada, con una delicadeza, como sus ojos se hacían chicos cuando sonreía, cuando le decías que era bello o un cumplido sus mejillas se volvían rosadas. Y el estúpido de Juan lo tenía a su merced por una estúpida apuesta, lo odiaba con toda su alma.
—¿Estas bien? — esa voz...
—Si, ¿y tú? — se giró para verlo.
—Supongo que bien, Juan me lo pidió de la nada— el uruguayo dio una mueca y sonrió.
—Felicidades— levanto los brazos y le dio la espalda.
—¿Estas molesto? ¿De qué te robamos la atención el día de hoy?
—¿¡De que me robaste la atención?!— se acercó a Roberto, a pesar de que él era mayor que Diego, su cuerpo se tensó ya que Diego le ganaba por fuerza y altura —Eso es lo último que me importa, Grady hizo la fiesta no yo, Hasvik me dijo que la harían hace dos horas. Yo planeaba estar en stream todo el puto día, ¿¡No te das cuenta?!— lo tomo de los hombros y lo acorralo en una pared.
—Diego...— oír eso fue la gloria, pero no debía pensar eso ahora.
—Odio las fiestas, me caga soportar a gente borracha, acepte porque TU venias— grito haciendo que Roberto comenzara a temblar, sus ojos comenzaron a llenarse lágrimas, Diego lo soltó.
—Lo siento, Diego, yo no sabía que tu...
—Nadie lo putas sabe, solo Grady y Vane, pero creo que ahora tú también, pero que puedo hacer, Juan está contigo ahora y eso me está matando porque hoy...— se calló en seco ¿le diría? ¿O solo quería joderlo?, se remojo los labios, Roberto seguía cada uno de sus movimientos.
—Diego, debo irme— Diego lo tomo de la cintura y lo comprendió todo.
—Fuiste tu— Roberto lo miro, este comenzaba a temblar ¿frio? ¿nervios? Diego no sabía leerlo —Tú me besaste, fuiste tu..
—Víctor me ofreció dinero y acepte.
—¡Hasvik le ofreció dinero a Juan para estar contigo!
—Mientes.
—No me creas— Diego se acercó al mayor, este solo lo miro —Cuando lo beses, mira cómo reacciona, la persona que realmente te ama, te besara primero.
—Diego, para, por favor— Roberto trato de alejarlo, pero Diego tomo sus muñecas y puso sus manos arriba de su cabeza, se acercó a la cara de Roberto y espero un par de segundos, veía como lagrimas recorrían sus mejillas rosadas.
—No te voy a obligar a nada que tu no quieras— rozo sus labios con los de Roberto, sus respiraciones se mezclaban, la música era tan fuerte y sus amigos estaba borrachos que no se habían dado cuenta de que dos personas faltaban.
—Di-Diego— dijo Roberto pausadamente, —Bésame— el uruguayo sonrió, junto sus labios con Roberto, dejo sus manos libres para tomarlo de las caderas, sentía como Roberto jugaba con su cabello, se alejó unos centímetros de él y beso su frente.
—Él no te merece, mereces ser feliz y aunque él está en mi camino, luchare por ti con todo mi corazón, esta es una pelea entre Juan y yo— se alejó de Roberto, antes de entrar a la casa lo miro —Amo tus mejillas sonrojadas.
Entro a la casa y miro a Juan "Que gane el mejor"pensó, tomo un vaso de cerveza y tomo un poco.
—¡Que viva el puto cumpleañero! — grito Hasvik, todos alzaron sus copas.
—¡Que viva yo! — Diego grito, miro como Roberto entro por la puerta y como Juan lo abrazaba —¡A ponernos pedos!
Roberto sonrió, aún tenía sus mejillas un poco rosadas, Diego moría por el pero hoy, debía prepararse para la lucha.