Tomo mi cabeza entre manos intentando que esa acción calmé mis dolores de cabeza. Miro los papeles esparcidos por mi escritorio con cansancio, desde hace días estuve ocupada en mis trabajos, ambos me toman tiempo, energía y dinero.
Los días pasaron y me enfoque tanto en el trabajo que descuidé la organización de la feria de libros y me desconcentraba a la hora de ensayar la coreografía. Pero todo poco a poco se va calmando, solo necesito un respiro de todo.
Unos toques en la puerta me hace levantar la vista a la vez que ese rubio que llegó a mi vida sin avisar, entra con una sonrisa.
- Pequeña, me encanta tu academia, es muy linda y las bailarinas también. - rio ante lo último.
- Cómo estás, promiscuo?
- Pues, tu dirás, extrañando a mi amiga trabajadora. - hace un bobo puchero, y se sienta frente a mí.
Acomodo los papeles y veo cómo él deja unos Cafés y unos cupcakes.
- Sé que eres más de las papas y hamburguesas pero no creo que eso sea muy sano a las once de la mañana. - comenta, tomando de su café.
Lo apunto con un dedo y arrugó ligeramente las cejas.
- Siempre es buen momento para unas papas y hamburguesas, Max. - él alza las manos en son de paz. - Pero gracias, desde las siete estoy sentada aquí y apenas pude tomar agua.
- Y eso por qué?
- Digamos, que no es fácil mantener dos trabajos con sus cuentas, un departamento, mis gastos, la organización de la feria de libros y no perder la cabeza. - menciono, dándole un bocado al cupcake de vainilla.
- Con que esto es la adultez. - murmura divertido. - Y... no hay nada más?
- No.
- Nada?
- Nada.
Entrecierra sus ojos en mi dirección.
- Segura?
- A dónde quieres llegar? Pregunta, lo que quieras.
- Me contaron unos pajaritos que estuviste con el pelinegro que me quiere matar con la mirada. - bufó sabiendo quienes le dijieron. - Espere que me lo contarás tu, ya sabes, cómo dos chismosos.
- Como dije, estuve muy ocupada y sí, paso algo entre nosotros.
- Y? Dime más. - se queja.
- Qué quieres que te diga?
- No lo sé. La tiene grande? Valió la pena? Se odian? Se van a casar? Le dijiste que estás enamorada de él y le hiciste un amarre? Fue mejor que conmigo? - me atonta tantas preguntas. - Algo, pero dame mis detalles!
- Eres peor que las chicas. - él espera a que responda. - La tiene muy bien, si valió la pena, no nos odiamos, no nos vamos a casar, no lo dije sobre mis sentimientos y no responderé la última. Feliz?
Él se cruza de brazos y me mira mal.
- El no responder la última me dice que fue mejor que yo. - se señala. - Fueron unas geniales polvos, pequeña. Lo di todo.
- Max! Joder, no dije que no fueran geniales, solo que no responderé eso y menos a ti. - ruedo los ojos.
- Bien, bien. Pero, por qué no le dijiste sobre tus sentimientos hacia él? - le da un gran mordisco a su cupcake.
Le pongo mala cara.
- Cómo quieres que le diga? - cuestiono. - Oh, si! Lucas, más rápido, sí. Y estoy enamorada de ti. - finjo gemir. - Ah, si? No era el momento.
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Amándote
Teen Fiction[ Romance ] +18 Siempre estuvo en mi vida, en cada momento y en cada recuerdo habitado de mi mente pero no sé en qué momento comencé a enamorarme, a amarlo y verlo de una forma distinta. Solo sé que seguiré Amándote por siempre. Atte: Kay Harrison...