-Tienes que darle oportunidad para explicarse- negué mientras estaba acostada con mis ojos cerrados en el sofá de mi apartamento
-Ayleen no puedes ser rencorosa- la mire enojada
-No lo soy Sofía- me queje
-Claro que sí, porque ahora mismo no le respondes nada cuando el pobre te busca por todos lados- me senté de golpe
-Así que lo defiendes ahora- estaba un poco cabreada
-No es que lo defienda Ayleen, sino que por lógica merece que hablen- arregle mi vestido
-Ahora si que necesito ir al antro- busque mis tacones para colocármelos
-Liam me dijo que viene en camino- asentí
Me arregle mi maquillaje ya que no quería seguir con su sermón.
Habíamos quedado en salir hoy para poder relajarme, pero Sofía lograba que no me relajara en lo absoluto.
Esperé unos minutos hasta que Liam llegó.
Había un antro que había conocido, al cual me encantaba ir cuando estaba cabreada en muchas ocasiones.
-No bebas tanto- Liam me miro preocupado cuando llegamos
-Sabes que jamás hago esa promesa- le sonreí para entrar
-Es gusto verla de nuevo señorita Ayleen- me saludó uno de los que prepara las bebidas
-Es bueno regresar de vez en cuando- le sonreí
-Vi su noticia- cerré mis ojos
-Ni me lo recuerdes- lo escuché reírse
-Ya veo que anda haciendo estragos con los hombres- negué riendo
-Es el animal que te conté la primera vez que vine- hizo cara de sorpresa
-Entonces está difícil ahí porque siempre estuviste enamorada de él hasta los huesos- asentí
-No pienso negarlo- reí
Tome varios tragos mientras hablábamos un poco.
Luego fui con Liam y Sofía quienes bailaban en medio de la pista.
Bailé un tiempo con ellos hasta que un hombre se me acercó.
-Hola preciosa- se acerco a mi oído
-Hola- le sonreí
- ¿Bailas? - volvió a acercarse a mi
-Ya lo hacemos- le respondí de la misma forma
El tipo no estaba mal.
Él es mucho más alto que yo, su cabello corto, sus ojos verdes, labios carnosos y un buen perfume.
-Me presento soy Arturo- colocó sus manos en mis caderas para pegarme más a él
-Ayleen- me limite
No es que vine aquí a hacer amigos a esta hora.
Mis caderas se contonean de lado a lado sin importarme nada.
-Amiga- Sofía nos interrumpió
-Pasaron por ti- señalo a mi espalda
Ahí estaba Gael con una cara de pocos amigos.
-Hoy me voy con mi amigo Arturo- toque su pecho y por dios que bien tonificado lo tenía.
-No caliente más la hoya mujer- negué
-Yo no lo llame y no le pedí que viniera, ahora si me permites tengo más canciones que bailar- me solté de su agarre
Ahora con más gusto me restregaba contra el cuerpo de Arturo
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Holidays with my Boss
Romance¿Qué pasaría si tu jefe te pide ser su pareja por las fechas festivas? Un cambio en mi contrato cambia todo. Un despecho por una ruptura hace que acepte por puro desquite. Él es todo el jefe amargado que no permite que nadie se meta en su vida priva...