Holidays with my Boss

T2.36

Gael Mercier

Me levanté con un dolor de cabeza que no me daba ganas de salir de la cama.

Nada me salía como quería.

-Amor te cocine el desayuno- la escuché hablarme

-No me siento bien- fue lo único que respondí

Sentía como ella colocaba su mano en mi frente.

-Tienes un poco de fiebre- susurro mientras la sentía moverse por la habitación

Cuando abrí mis ojos un poco ella estaba sentada a mi lado mientras me colocaba un paño húmedo.

-Aprendí esto de mi madre- me sonrió

-No te ves nada bien- dijo preocupada

-Ayer tuve una reunión hasta tarde- la mire ya que debía comentarle de lo que pasó

-Déjame traerte tu desayuno y hablamos- asentí para que ella continuara con lo que quería hacer

Cuando salió me puse de pie para ir al baño a lavarme la boca.

-Gael- me llamó preocupada

-Voy- respondí saliendo del baño

Ella me obligó de nuevo a sentarme en la cama.

-Ah comer- dijo como si fuera su hijo

-¿Te imaginas cuando le demos comida a nuestro hijo?- ella sonrió

-Sin lugar a duda sería precioso- vi sinceridad en su mirada

-Amor tenemos que hablar de algo- dije seriamente

-¿Qué pasó?- su tono fue preocupado

-Bueno descubrimos que alguien en la empresa estaba haciendo fraude- ella abrió sus ojos demasiado

-¿Qué tengo que ver yo ahí?- la note demasiado nerviosa

-Bueno me robaron 45 millones y el banco en donde se deposito esta a tu nombre- rápidamente se sorprendió mientras sus ojos se llenaban de lágrimas

-Yo no te robe nada, debes creerme. Jamás te haría tanto daño- sollozo

-Preciosa se que no fuiste tu, ya tenemos los culpables- sonreí

-Aunque no me lo creas mi asistente salió involucrada también- limpie sus mejillas

-No tuve nada que ver- volvió a sollozar y la abracé con las pocas fuerzas que tenía.

-Amor solo debes comparecer en tribunal para declarar que tu no tienes trato directo con el banco- la mira atento

Ella asintió, pero sus lágrimas continuaban cayendo

-Tranquila que te creo- sonreí para que se calmara un poco

En silencio desayune lo que me había traído.

Se notaba su preocupación en su rostro.

-No dejare que te hagan daño- tome su mano para mostrar mi apoyo

-Tranquilo lo importante ahora es que tu te sientas mejor, después vemos como arreglamos todo- asentí sonriéndole

¿A esto se refería la señora?

"Algo malo se avecina para ti" – se repetía una y otra vez en mi cabeza

-Llamaré al doctor para que venga- asentí mientras ella me dejaba solo en la habitación

-Yo no creo en supersticiones- comente tomando mi celular

Scarlet me había enviado varios documentos legales en donde podía ver en lo que estaríamos demandando a mis dos empleados.