T2.17

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Nada me hacía sentido en estos momentos.

Continuaba amarrada a la cama.

-¿Qué hace él ahí?- había una foto de mi expareja.

Mientras más atención le daba a la pared más fotos de mi pasado había.

Una foto es la única que no me cuadraba.

-¿Qué tiene que ver él?- susurre

La puerta se abrió y ahí estaba él de nuevo con una bandeja con comida.

-No pienso dejarte morir de hambre- cerré mi boca

-No quiero comer- dije rápidamente

-Tienes que hacerlo- se sentó a mi lado

Con un tenedor intento darme comida, pero me negaba.

-Debes comer- intentó abrirme la boca

Me movía como podía, aunque ya mis extremidades me dolían.

-Eres una desconsiderada- lanzó la comida contra mi cuerpo

Estaba caliente así que me quemo un poco.

Así fueron varias veces.

Cada vez estaba más sucia.

-¿Puedo bañarme?- levante la voz, pero nadie me respondía

Poco a poco del mismo cansancio me quede dormida.

No quería, pero mi cuerpo no daba para más.

***

Sentía como me tocaban.

Cuando me intenté mover estaba amarrada de nuevo con un pañuelo en mi boca.

Sentí como el agua comenzó a caer sobre mi cuerpo y ahí noté mi desnudez.

Él me miraba atento mientras el agua mojaba por completo mi cuerpo.

Con unos de mis movimientos me caí contra el suelo.

-Quédate quieta- volvió a sentarme en la silla.

-¿Enserio no me reconoces?- negué

Tomó un envase que tenía agua y me lo lanzó a la cara.

-¡SOLO LO PUEDES RECONOCER A ÉL!- gritó lanzándome agua

Me sentía muy humillada

Baje mi mirada

-Ayleen- me tomo de mi barbilla

-¿Enserio no me reconoces?- negué con miedo otra vez

Él me tomó de mi brazo para ponerme de pie.

Busco una toalla que pasó por mi cuerpo como pudo.

-Camina- señaló, pero mire mis pies amarrados

-Te los quitare, pero ni se te ocurra hacer algo estúpido- negué con miedo

Con brusquedad también quitó la banda que había en mi boca.

Me jalo hasta llevarme de nuevo a la habitación en donde me encontraba.

-Mira no te acuerdas de él- me tomó de mi cabello y me pegó a la foto de un chico gordito que había conocido en mis últimos años en la escuela.

-¡Que lo mires!- volvió a gritarme

-Si me acuerdo de él un poco- susurre

-¡Un poco!- me golpeó contra la pared

Holidays with my BossDonde viven las historias. Descúbrelo ahora