Gael Mercier
-Buenas- entre a mi oficina
Mi asistente me esperaba con café negro.
No se cuantas veces le había dicho que no me gusta el café negro.
-¿Qué tenemos para hoy?- me senté en mi silla con el café frente a mi
-Es el día de visitar el centro comercial- asentí sin mirarla
-Una pregunta- pausé- tenemos escasez de lecho o que- levanté la taza
-Pensé que le gustaba el café negro- dijo nerviosa
-Olvídelo, solo no me traiga más café- ella asintió
-Bueno vamos que el chofer nos llevé al centro comercial- me puse de nuevo de pie
En la mañana había dejado a Ayleen dormida en la cama ya que anoche se acostó tarde diseñando los modelos de Nestor.
Estaba muy orgulloso de su crecimiento.
-Gael- una señora me detuvo en mi camino
-Algo malo se avecina para ti- me solté de su agarre
-Señora usted no me conoce- la mire mal
-Algo malo está por llegar- me señaló
-Continuemos- empuje un poco a mi secretaria para continuar con nuestro camino
-¿Qué raro no?- asentí mirando a mi asistente
-Quizás estaba loca- no le respondí a su comentario
Algo me hizo sentirme preocupado.
-Haré una llamada- dije antes de subirme al auto.
Llamada
-Hola- su voz de dormida me quitaba un peso de encima
-Amor- sonreí
-¿Paso algo?- esta vez la noté preocupada
-Nada, solo quería decirte que te amo con toda mi vida y me haces el hombre más feliz de este mundo- dije sin pausa
-Amor tranquilo respira y hablamos cuando llegues a casa. También te amo- su respuesta me hizo sonreír automáticamente
-Hasta la tarde- corte la llamada
Fin de llamada
Giré sobre mis talones y subí al auto.
El chofer sabía bien a dónde iríamos así que no había por qué darle directrices.
Al llegar al centro comercial estaba lleno de gente.
-Cuidado- tome del brazo a mi asistente cuando se tropezó
-Lo siento- se disculpó sonrojada
-Tranquila son cosas que pasan- volvimos a caminar
Algunos gerentes al reconocerme me saludaban
Pase por la tienda de Ayleen y estaba llena de clientes.
Pasamos varias horas visitando los diferentes pisos del centro comercial.
-Si quieres ve a comer tengo una cosa que hacer solo- ella asintió para irse de mi lado
Coloqué mis manos en mis bolsillos y comencé a caminar.
Tenía una meta y hoy debía cumplirla.
-Bienvenido- me saludo una chica al entrar
-¿Cómo lo ayudó?- sonrío
-Necesito anillos de boda- mantuve mi semblante serio para que no notara mi nerviosismo

ESTÁS LEYENDO
Holidays with my Boss
Romantizm¿Qué pasaría si tu jefe te pide ser su pareja por las fechas festivas? Un cambio en mi contrato cambia todo. Un despecho por una ruptura hace que acepte por puro desquite. Él es todo el jefe amargado que no permite que nadie se meta en su vida priva...