𝐵𝑒𝑠𝑡 𝑊𝑖𝑠ℎ𝑒𝑠, - 𝐷𝑟𝑎𝑐𝑜 𝑀𝑎𝑙𝑓𝑜𝑦 [Draco&tu] +18

Capítulo 34

*Draco

"Un día"

Jasón tenía razón en el fondo. Ayer me dijo que ella merecía saberlo. Ya lo sé, coño, ya lo sé. Hoy mismo le daré la carta que le escribí, porque sé que en persona no me atreveré. Bueno, todos saben ya lo cobarde qué soy al fin y al cabo.

Casi todo el mundo parece notar mi cara de depresión porque tengo la sensación de que todo el mundo me mira con lástima cuando voy por el pasillo. La verdad es que mis notables y profundas ojeras, mi piel más pálida de lo normal y mis ojos hinchados lo dicen todo y es normal que todo el mundo me mire raro.

Mis amigos siguen ofreciéndome muchísimo apoyo aunque también se preocupan por mi mal aspecto. La verdad es que no les merezco después de como les he tratado a lo largo de estos años.

Ahora mismo estoy yendo a lo que van a ser mis últimas clases en Hogwarts, pero no solo para mí, sino para todos los de último año. Hoy era el último día de clases antes de fin de curso. Dentro de dos días sería la Hoguera de Fin de año. Ya se veía la alegría en la cara de todo el mundo. Llevaba los siete putos años esperando a que llegara la hoguera de séptimo, ya que es la mejor, y me iba a quede sin ir por un día. Recuerdo lo emocionada que estaba ____ por ir. Habíamos hablado infinidad de veces de lo bien que nos lo pasaríamos juntos. Todo era una puta mierda.

Iba a torcer la esquina para dar a la clase de Encantamientos, al levantar la vista vi a aquella lechuza. Era la que me mandaba mi madre para enviarme todas las cartas.

¿Habría venido para entregarme otra carta? Me acerqué corriendo hacia ella cuando pasó algo que debí haberme imaginado desde el principio.

***

*____

Iba a saltarme las clases pero no me importaba. Había estado intentando salir de alguna durante todo el día y no había tenido ninguna ocasión; por lo que era ahora o nunca. Estaba corriendo por los pasillos en sentido contrario que toda la multitud, por lo que ya me había llevado algún que otro golpe y empujón. Me dirigía a las mazmorras, más en concreto a la habitación de Draco para ver si le encontraba de una vez y podía hablar con él sobre Jason. Llevaba bajo mi brazo el libro del que Hermione extrajo toda la información.

Llegué a la puerta, dije la contraseña, subí las escaleras de las habitaciones de los chicos y corrí hasta el fondo del pasillo, donde estaba su habitación. Me paré unos segundos a recuperar el aire y llamé. No hubo respuesta, por lo que entré por si estaba dormido (sabía que no iba a estar pero la esperanza es lo último que perdemos). Como imaginaba, no había nadie, me asomé al baño pero tampoco estaba.

Me senté en la cama, agotada por la carrera y me dejé caer hacia atrás. Cuando giré la cabeza vi un sobre sobre la mesilla de noche y como bien cotilla que soy la cogí.

Para mi sorpresa, mi nombre estaba escrito en aquel sobre; no se por qué, pero ya tenía el mal presentimiento de que no me iba a gustar nada lo que estuviera ahí escrito.

Abrí la carta:

Mi pequeña ____...