Caitlin Johnson

Capítulo 19

Habían pasado quince minutos desde que llegamos y parece que ha pasado una eternidad. Él seguía concentrado en terminar su taza y no paraba de mirar a través de la ventana.

—¿No vas a tomártelo?—preguntó señalando mi café y yo le di un sorbo.

—¿Contento?—dije mirándole fijamente—. Al grano por favor.

—Bien, ¿Cuál es vuestro siguiente paso?

¿Esto era una broma? Aunque pensándolo bien seguro es una pregunta trampa. Tengo que tener cuidado de lo que le digo, cualquier respuesta equivocada habrá ganado.

—Si te refieres a la policía, mejor preguntales a ellos—dije firme—. Porque yo no lo soy.

—Ya, pero te metes en sus asuntos—dijo, pero esta vez parecía nervioso o enfadado incluso.

¿Y este cambió de humor?

—Si sus asuntos son contigo, también son los míos-estaba molesta-. ¿Qué se supone que tengo que hacer? Tu fuiste la causa de la muerte de mis padres, ¿y aún te preguntas por qué me meto?

Traté de calmarme porque no era el momento de mostrarse nerviosa y mucho menos delante de él.

—Buen punto-dijo sacando una tarjeta de su bolsillo—. Te voy a dar un consejo. No pienses que en el mundo solo hay blanco o negro porque si lo hicieras no estrías entendiendo nada. Tal vez yo sea el malo para ti pero no te dejes llevar por el resentimiento y el odio que me tienes, hay más cosas aparte de eso ya que el ser humano tiende a actuar en base a sus necesidades.

—¿Deberíamos ser amigos entonces?-dije irónicamente.

-Ja, ja, ja. No pero tenlo en cuenta, la mayor amenaza no siempre es la que se ve—cada vez estaba entendiendo menos a este tipo—. Este es mi número, si necesitas cualquier cosa llamame.

Esto parecía una cámara oculta, ¿me acaba de dar su número?

—¿Por qué piensas que no te voy a denunciar?

—Se que no lo harás—dijo levantándose y dos hombres detrás de mí hicieron lo mismo. Supongo que este es el nivel de poder que tiene—. Porque no le contaste nada de nuestro primer encuentro a nadie. Nos vemos.

Me quedé sentada un tiempo asimilando todo lo que había pasado, ¿qué se supone que voy a hacer ahora? Solo Arón sabe que me encontré con él y si se lo cuento a mi tía me mata, tampoco puedo contar con López. Me estaba frustrando demasiado.

—Hey—dijo una voz detrás mía—. ¿Estás bien?

—¡Arón!—chille y le di un codazo—. Deja de aparecer así por dios.

—Perdón, ¿desde cuando tienes tanta fuerza en el brazo?

—Oye, hay que hacer algo—dije decidida y el solo me miró desconcertado.

—¿Hacer qué?—preguntó confuso.

—No lo sé, pero creo que Matís está tramando algo muy chungo—le susurré.

Le conté todo y por su puesto le enseñé la tarjeta, él me dijo que la guardara por si acaso aunque pienso que si intentamos sacar cualquier prueba o información no vamos a encontrar nada. Seguimos discutiendo el tema y sacando conclusiones que nos llevaban a caminos cerrados y nos pusimos de acuerdo en llamar a Juliette y que nos ayude con el plan. Resulta que era muy buena en la tecnología y todo lo que le pidieras rastrear lo conseguía.

—Aún queda el tema del comisario—dije cambiando de tema—. ¿Qué vamos a hacer?

—Solo lo sabemos nosotros y Jully, así que necesitaremos reunir pruebas si queremos interrogarlo y por ahora la cosa no va muy bien.