capítulo 6

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Jimin manejaba de regreso al departamento,  Hio-ry dormía plácidamente en su sillita en el asiento trasero,  cuando llegaron lo sacó despacio para no despertarlo y como pudo agarró su bolso y la mochila de su hijo.

Las llaves del departamento eran un problema,  no lograba sacarlas de su bolso con Hio-ry en sus brazos,  en esos trámites estaba cuando la puerta se abrió desde dentro,  apareciendo Ho-Seok en ella.

- ¿ Feliz de verme cuñadito?- le dijo Ho-Seok sonriendo.

Jimin sonrió.

- No sabes cuanto,  no podía abrir la puerta- le dijo Jimin riéndose.

Hio-ry abrió sus ojitos y vio a Ho-Seok frente a él y el sueño se le fue en un dos por tres.

-¡ Tío Ho!- gritó feliz estirándole sus bracitos para que lo cargara.

- ¿ Cómo está mi niño hermoso?- le dijo Ho-Seok besando repetidamente los cachetitos de Hio-ry que reía contento de ver a su tío.

- Ben tío Ho, ¿ tlajiste degalo a Osito?- preguntó entusiasmado.

- Porsupuesto, ¿quieres verlo?- le preguntó Ho-Seok entrando al interior del departamento con su sobrino en brazos.

- ¡Yupi!- gritaba Hio-ry entusiasmado.

- Ya te he dicho que no me lo malcries- le reprochó Jimin a su amigo.

- ¡Bahh!, es mi único sobrino déjame consentirlo- le dijo Ho-Seok depositando al niño en el piso para entregarle el regalo.

Jimin meneo su cabeza,  nunca podía ganarle a Ho-Seok.

-¡ Papi mira!, un camión de bombelos- le dijo Hio-ry mostrándole el juguete a Jimin.

-¡ Guau!, ahora mi niño apagará muchos incendios- dijo Jimin haciendo que estaba impresionado y Hio-ry se puso a correr con el camión por la salita de estar.

- ¿Cómo te fue en tu viaje Hobi?- le preguntó Jimin sentándose en el sillón.

- Excelente,  no me puedo quejar,  firme un contrato importante para producir un disco en Japón- le contó entusiasmado.

-¿ También te irás entonces?- le preguntó Jimin un poco triste por él y por su hijo.

- Tranquilo,  eso será a partir del próximo año, por ahora trabajaré desde aquí- le contó Ho-Seok dándole un ligero apretón al hombro de Jimin.

- Que bueno,  así tendremos tiempo de que Hio-ry se acostumbre a la idea de no verte tan seguido.

- Lo sé- le respondió Ho-Seok.

Ho-Seok sabía que Jimin lo extrañaría cuando eso sucediera y el también a ésos dos pequeños,  porque para el Jimin era como un niño pequeño, solo esperaba que no se encerrara mucho en si mismo.

Cuando su hermana se lo presentó quedó gratamente impresionado con Jimin,  tenía un aura de inocencia y dulzura que lo conquistó de inmediato y con el paso de los años se convirtió en su mejor amigo,  incluso cuando se divorció de su hermana ellos siguieron siendo amigos,  siempre notó un aura de tristeza y anhelo en Jimin,  pero él jamás preguntó nada, intuía que era algo de su pasado, pero Jimin tenía derecho a tener sus secretos también.

- ¿ Te quedas a cenar?- le preguntó Jimin.

- Sí, tío Ho!, ¡Quélate!- le rogó Hio-ry dejando de jugar.

- Si me lo piden con tanta insistencia,  me quedo- dijo Ho-Seok tomando al niño para alzar lo por los aires, mientras Hio-ry reía a carcajadas.

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