INEFABLES

Princesa

-Hola Rosie!- Minnie le sonreía sentada frente a ellos.

-Oh Hola!- le saludó de vuelta con timidez.

-No sé si te habías enterado, pero este viernes es mi cumpleaños y hemos planeado una pequeña fiesta en la playa.

-Eso está permitido?- preguntó Jae con duda.

-Hemos hablado con nuestro coordinador, mientras no hayan sustancias adictivas nos dejarán... Por supuesto están invitados

Volteó a ver a Jae quien también había hecho lo mismo con ella, ambos parecían dudar, Minnie nunca les había dirigido la palabra y ahora los invitaba a su fiesta, aunque con mucha dudas, aceptaron ir.

Pero aquello apenas había sido la punta de un iceberg de rarezas durante el día, todas las chicas de su torre la saludaban en los pasillos y le daban cumplidos, no había podido gozar su reciente fama porqué simplemente no sabía a que se debía.

-Hey Rosie en horabuena por lo de Jimin- le dijo Hoseok, un amigo muy cercano a su hermano- Sabes dónde está? lo he estado buscando.

-Eh no, no lo sé... espera porqué las felicitaciones?

-Va a ser Rey no?- dijo él chico  alejándose, procesó lentamente su explicación sin llegar a un punto exacto, miró a Jae quién hasta el momento se mantenía junto a ella.

-Jae... podemos hablar más tarde? quiero ir con mi hermano.
-Si, si esta bien, iré con los chicos, cualquier cosa buscame en la torre.- le dijo antes de darle un beso en su frente e irse, rápidamente pensó en donde estaría su hermano, siempre lo podía encontrar entre clases en el salón de astronomía donde bailaba junto a Hobi, pero si éste no lo había encontrado seguramente no estaba ahí.

Así que tomó su segunda opción, el primer lugar a donde Jimin la había llevado cuando llegó al castillo, ésta vez le hizo caso a su novio y evitó las rocas, pronto estuvo en el mar nadando y no había pasado ni un minuto así, cuando vio los pies de su hermano dentro del agua, tomó el derecho para asustarlo aunque sin mucho exito.

-Oh Rosie, eres tú.

-Porqué estás aquí solito Minnie?- se sentó junto a el evitando tocar el agua.

-Estaba pensando en el futuro.- dijo mirando en un punto fijo en el mar.

-Como Rey o sin serlo?- preguntó con la intuición de que algo iba mal.

-Como él Jimin que debo ser o el Jimin que quiero ser, más bien.

-Cual te hará más feliz?

-Creo que con ambos puedo ser feliz pero siendo uno u otro voy a perder a alguien que amo. - dijo lastimero.

-A mi no me vas a perder.- aseguró uniendo sus manos.

-Rosie... no quiero ser Rey, no si tengo que sacrificar tanto.

-Esta bien Minnie, aún tienes mucho tiempo.

-No lo sabes Rosie? Papá anunció la fecha de mi coronación...

-Oh mierda!- maldijo pensado en su padre, lo amaba, pero le estaba quitando a su hermano.

-En el próximo solsticio de verano, se iniciarán los honores de las islas y debo estar casado para entonces.

-Te irás?- Su hermano la miró con tristeza- Sé qué no te casarás con una mujer.

-Cómo?-Jimin cambió su mirada, a una de miedo, que le dolió más.

-Eres mi hermano Minnie, quién te guste no afecta en nada el hecho de que te amo, incluso si es un hombre.- Su hermano terminó abrazandola mientras lloraba, su pecho subía y bajaba con cada hipido. Ella sólo podía pensar en consolarlo, le entristecia su situación, no el hecho de que fuera gay, no era algo que desconocía, muchos en las islas lo eran y no estaba mal visto, pero el rey debía dar herederos de sangre, si su hermano no podía darlos debía renunciar, pero esa era una opción cruel dentro de su raza, si renuncias debes irte, era la ley.