Me arreglaba el cuello de una camisa de vestir blanca, mamá la había comprado para mí hacía no mucho y a penas la había usado un par de veces, me sentía nervioso.
— ¿A dónde irás tan guapo? — mi mamá me miraba desde el marco de mi puerta.
— Es el cumpleaños de Luke mamá — me arregle el cuello una vez más — quiero verme bien.
— Creo que ya te excediste de eso, te ves increíble cariño — se sentó en mi cama — ¿Qué vas a regalarle?
Sonreí, tenía muchas ganas de contárselo a alguien así que me senté también en la cama y busque en el cajón de mi pequeña mesa, saque una pequeña caja y la abrí.
— Ty — me miró sorprendida — Son hermosos ¿Los elegiste tu?
— Por supuesto ¿Quién más tendría tan buen gusto?
— ¿De donde sacaste dinero Tyler? No se ven como algo barato.
— Esto, bueno, un viejo amigo me debía algo así que solo me devolvió el favor, no es nada de lo que tengas que preocuparte mamá, juro que no e hecho nada ilegal — sonreí enseñando los dientes, después vi mi celular — debo irme ya ¿Crees que puedas pasar por mi después? No quiero quedarme en la casa de Luke y seguir causando molestias.
— De hecho iba a comentarte lo mismo — acaricio mi cabello — te extraño aquí en casa también cariño.
— Vale, trataré de no perderme demasiado — tomé mi chaqueta y metí la pequeña caja en una bolsa — me tengo que ir má, te quiero, nos vemos más tarde.
Mi mamá sonrió y me dio un beso en la mejilla, baje las escaleras y salí con prisa para tomar el bus, realmente no me apetecía caminar, me sentía agotado y no sabia muy bien el por qué.
Llegué a la casa y toque la puerta emocionado, la mamá de Luke me abrió, se veía muy contenta.
— Hola Ty, pasa, pasa cariño — ella cerro la puerta tras de mi — Luke está arriba pero bajara en un momento.
En la sala habían un par de personas más, eran amigos de los papás de Luke, los saludé.
— ¿Creen que pueda subir a ver a Luke? Tengo algo que darle.
El papá de Luke me miró y sonrió amablemente.
— Ya lo conocían pero se los presento una vez más, este es Tyler, el novio de mi hijo — me presento con un par de amigos que me sonrieron amablemente también, luego me miró — desde cuándo necesitas nuestro permiso, anda sube, estás en tu casa hijo.
Sonreí al escuchar eso, los papás de Luke siempre me hacían sentir muy bien, subí las escaleras y camine hasta llegar a la puerta de Luke, toque suavemente.
— ¡Esta abierto! — escuché, abrí la puerta y entre — ¡Vaya! ¿Desde cuándo eres así de guapo?
Me acerque a el y bese su mejilla rápido, lo mire un segundo y después lo bese en la boca.
— Desde que nací, eso me cuentan — sonreí — tengo algo para ti.
— ¿Qué es? — dijo, se acercó a mi.
Llevaba unos pantalones de mezclilla de tiro alto y una camisa de botones rallada, se veía realmente guapo también, ambos nos sentamos en la cama y el me observaba con atención mientras yo sacaba la pequeña caja, la abrí y el sonrió.
— ¿Te me vas a proponer acaso? Si es así, acepto.
Sonreí y luego hice una mueca, el soltó una risita malévola.
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Una mala historia mal contada. | Finalizada |
No FicciónTyler es un mal narrador y Luke, bueno, él carga su vida en un tanque. [🏳️🌈] l(G)(B)tttiq. [📌] contiene términos médicos inexactos al igual que de la FQ que aún están en edición.