Capítulo 43: noche del demonio parte dos

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— No debimos dejarla — le recriminó Jeff mientras caminaban por las vallas de los juegos para llegar a dónde creían que estaban los chicos.

— Sid puede con él. Ser una hija de un mafioso Chino tiene ciertas ventajas — dijo Lemy mientras recordaba a una vieja amiga tan ruda como la castaña.

El lugar era enorme, no se entendía porque no lo demolian o intentaban recostruirlo, el sonido de los juegos rechinando y los altavoces en mal estado solo empeoraba en ambiente que rodeaba todo. Tras dejar a Sid peleando con Runer era el momento de encontrar como ayudar a Alex y a su amigo extranjero.

— La puta madre — insulto de la nada Jeff.

— Que te pasa — dijo Lemy.

— Me arde el ojo — se quejo Jeff.

— Entonces quitate el lente de contacto — dijo Lemy sorprendido a Jeff.

— ¿Como lo supiste? — dijo parando se avance.

— Es un buen lente pero si prestas la debida atención puedes notar la falta de brillo en la pupila — dijo Lemy.

— Entonces es caro al pedo — dijo retirando el lente y mostrando un ojo mucho más claro que el otro tirando a un color gris — ¿hace cuanto te diste cuenta? —

— Diría que la segunda vez que te vi a la cara — dijo Lemy — se que por el tema del bully muchos ocultan ese distintivo —

— Que charla tan homo — se escucho una voz en las sombras, Lemy y Jeff rápidamente se pusieron en guardia. Fueron descuidados, al ser detectados sin que se dieran cuenta podría haber sido muy peligroso. Si el dueño de la voz tuviera unas neuronas, los hubiera atacado silenciosamente y hubiera tenido oportunidad.

— Así que el gordo manda a su perro para atacar a unos niños ¿verdad?— dijo Jeff mientras buscaba con la mirada su ubicación.

— Mejor que el fenómeno se calle — dijo para enojar más a Jeff — esta charla es para gente normal —

— Me llamas fenómeno, para alguien tan escaso de neuronas es un insulto muy complicado calvo de mierda — dijo Jeff reconociendo la voz de Phill.

— Jeff cuidado!!— dijo Lemy que se interpuso entre su amigo y un dardo que apareció de entre las sombras.

— Maldito hijo de... — a los pocos segundos de recibir el dardo todo su cuerpo empezó a entumecerse.

— Que lástima — salió Phill de las sombras — mi intención era poner a dormir al fenómeno, pero bueno me conformo por noquear al idiota —

— Eres un desgraciado cobarde — dijo Jeff que saltó a darle un golpe, pero Phiill lo esquivo.

— Si que eres un crió estúpido — dijo para acto seguido intentar apuñalar a Jeff con su cuchillo mariposa — veamos como te sienta el rojo en la remera —

Luego de algunos intentos Phill logró atrapar de la remera a Jeff pero antes de intentar algo Lemy lo golpea con una patada en la espalda — Remedo de basura — dijo al ver a Lemy — como es que sigues despierto —

— Quizá soy inmune a la porquería que tenía ese dardo — dijo el castaño, aunque era una mentira, gracias a que entro en su estado acelerado logro mantenerse en pie. A costa de perder momentáneamente el mismo.

— Si tan solo tuviera mi pistola ustedes lagartijas ya serían manchas rojas en el suelo — dijo Phill muy molesto.

— Un arma es demasiado para un tipo que solo tiene materia fecal en el cerebro — dijo Jeff y le acento un golpe contundente en el estomago, no tan devastador como los que le enseño Lincoln pues no quería quedar incapacitado.

Regresando a casa [The Loud House]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora