Regresando a casa [The Loud House]

Capítulo 27: Siendo un buen hermano

Unas cuantas horas antes Camila estaba más que preparada para ir a la habitación de Lincoln, el deseo de la chica se hacia realidad y esta noche disfrutaría a mil ese momento. Junto a sus amigas planeaban como distraer a la maestra para que no diera en cuenta la ausencia de ella, estaban tan metidas en idear la escapada que de ni prestaban atención a Lucy que disfrutaba su tiempo de calma leyendo el ultimo libro de Haiku.

Para la gótica estaba muy lejos de su interés porque no le prestaban atención pero agradecía ese instante de paz, las chicas decidieron no hacer ningún ruido y si la maestra aparecía dirían que Camila estaba durmiendo ya. Con la confabulación de todas solo quedaba sacar un cabo suelto.

— Hey Lucy — dijo Camila llamando la atención de ella que ya temía — ven un segundo amiga — pidió ella aunque pareció mas una orden.

Lucy se acerco con mucho miedo y aunque no quería hacerlo su cuerpo se movía solo — ¿qué necesitas Camila? — se agarro del brazo y miró al suelo.

— Primero mirame cuando te hablo — dijo tomando del menton y obligandola a verla — veras tengo una cita importante esta noche y no quiero que las maestras se enteren ¿me harías el favor de mantener tu boca callada? —

— No temas Camila nosotras veremos que así sea — dijo una de sus amigas poniendo la típica pose de bully.

— Vamos chicas no sean rudas — dijo Camila que esto extraño a Lucy — no vayan a maltratar a mi futura cuñada — la cara de incertidumbre de Lucy era enorme — te vez confundida deja que te ilustre, esta noche me divertiré con Lincoln — termino de decri con una sonrisa y salió por la puesta dejando a Lucy fuera de si.

Por el lado de los chicos estaban en modo de espera ya que el maestro revisaba que todo estuviera en orden, Jeff veía como David, el idiota de la case y se podría decir que su bully personal, lo miraba listo para saltar le encima y reventarlo a golpes. Jefferson no entendía tan profundo odio por parte de esta maza idiota conocida como David, él era por así decirlo el perro lacayo de Camila, cuando ella no conseguía lo que quería con su dinero o a base de manipulación y intimidación era momento de que el perro rompiera algunas caras.

Ya el maestro se fue y todos allí empezaron a tirarle bolas de papel ensalivadas a Jeff que solo trataba de inorarlos — recuerda lo que dijo Lincoln — se dijo a si mismo por lo bajo. Al no tener respuestas las bolitas se convirtieron en objetos duros pero él siguió sin inmutarse, esta paz empezaba a molestar a David que esperaba que Jeff reaccionara rápido como era habitual y así comenzar a pelear.

David se canso — suficiente del interludio — dijo en voz alta — sino te quieres divertir que tal si nos divertimos con la linda Lucy — esto molesto a Jeff pero siguió sin mostrar cambio, cansado David decidió cambiar de locación entre todos tomaron al pobre de Jeff y lo llevaron a las afueras del hotel sin ser visto por los maestros.

Jeff no opuso resistencia y solo se quedaba cabizbajo lo que molesto a uno de los chicos que al llegar a un punto ciego del hotel lo tomó de la remera — ya me canse de esa actitud de mierda sino vas a dar el primer golpe deja que yo inicio este divertido momento — alzo el puño pero el golpe nunca salió, con un movimiento rápido Jeff metió sus cuatro dedos en la boca del chico y apoyo su pulgar en su cuello, esto sorprendió al muchacho pero no pudo hacer nada porque de un tirón y con muy poca fuerza la mandíbula del chico se dislocado.

El grito de dolor era inaudible pues no podía regular sonido con la mandíbula apuntando para la derecha, David y el resto no entraron en cuenta de lo que pasó hasta que uno reaccionó y golpeo a Jeff que logro cubrirse la cara. Los demás reaccionaron y se dispusieron a darle una paliza a Jeff que se puso en una extraña pose de pelea.