"Nunca lo esperé"

El amor y sus cosas

Capítulo 19

Leimer Green

Ya había pasado varios dios y aún Paola no se despertaba del coma, yo estaba al perder la cabeza necesito hablar con ella, necesito tocarla, besarla, necesito hacerle el amor.

Estábamos sentados en la sala cuando apareció el doctor la expresión en su rostro era diferente, como si lo que tuviera que decir fuera realmente importante.

¿Y si tiene algo importante que decir?

El doctor se acercó a nosotros:

- ¡Quien es Leimer el idiota! - no puede ser lo que estoy pensando, le hice saber que era yo - la paciente acaba de despertar y pregunta por ti.

No puedo creerlo, joder se despertó y pregunta por mi. Mire a su madre como buscando la aprobación de ella para poder pasar a ver a Paola.

Salí disparado para la habitación necesitaba verla esa chica me tenía loco.

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Paola Britt

Acabó de despertar y lo primero que veo cuando abro los ojos son equipos médicos y cables por todos lados, intento pararme pero no puedo me duele mucho el cuerpo y es cuando me acuerdo de lo que pasó, mi coche choco con alguien y se salió de la carretera chocando contra un árbol. Entra él médico por la puerta.

- Despertó señorita - empiezo a revisar mis ojos - como se siente le duele algo.

Negué con la cabeza

- Necesito ver al idiota - el médico me miró extrañado - usted puede buscarme al idiota.

- ¡Quién es el idiota! - verdad que así solo lo llamo yo - Usted recuerda todo lo que pasó.

Asentí.

- Puede llamarme a Leimer Green - dije - el es el idiota.

El médico me contó todo lo que me había pasado y que llevaba algunos días en coma causa del fuerte golpe que recibí

El médico asiento saliendo de la habitación y dejándome hay.

Estaba muy nerviosa porque desde de tanto tiempo volvería a ver a Leimer volvería hablar con el y si mi regresó aquí era por el porque no quería que siguiera como me había contado Meik.

Tocaron la puerta:

- Adelante - me acomodé en la cama.

- Hola - se acercó a mí - Como te sientes.

- Un poco adolorida - dije - pero aún no me muero.

El negó con la cabeza

- No digas eso - tomó mis manos - todos estuvimos muy preocupados por ti.

De pronto abrieron la puerta revelando el rostro de Gabriel que apenas sus ojos se encontraron con los míos sonrió.

- Ey princesa que alegría que estés despierta - la cara de Leimer cambio - estaba muy preocupado por ti.

Leimer se levantó y me miró con una expresión que no había visto nunca, lo que acaba de presenciar le molestó y lo se, abrió la puerta y salió dándole un fuerte tirón.

Estuvo un rato hablando con Gabriel cuando aparecieron el resto de personas que estaban en la sala, tienen cara de cansancio así que les pedí a cada uno que se marchará a casa ya que el médico dijo que si mañana amanecía bien me darían el alta. A pesar de eso Meik se quiso quedar conmigo hasta mañana.

- Tuve mucho miedo de perderte - se dejó caer en el sofá - pero tú eres fuerte y pudiste con eso.

Le di una sonrisa media triste ya que me sentía muy mal por como se marchó Leimer de aquí. El teléfono de Meik empezó a sonar y el salió de la habitación para contestar cuando entró su rostro era de preocupado.