MY ONLY LOVE ~KOOKMIN~

VI

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Después de un largo día de trabajo, Jungkook llegó a su casa directamente a buscar una maleta y arreglar un par de mudas, miraba y buscaba las camisas que quería llevar, quería verse presentable en aquellas dos reuniones, sacó toda la ropa del armario —aish no tengo nada— se sentó a la orilla de la cama cuando miró una caja que se encontraba al final de guardarropas, se agachó y con curiosidad miraba la caja. No se acordaba que la caja era propiedad de él.

—¿qué es esto? —dijo abriendo la caja Jungkook se sorprendió al ver lo que contenía la caja.

Tenia cuatro años de no tocar ni ver lo que contenía dicha cosa. abrió la caja y con mucho cuidado saco lo que contenía. Con un nudo en la garganta empezó a ver cartas de papel, unas flores marchitas, cartas a medio terminar y lo que menos se esperaba el collar.

Con una gran sonrisa agarró el collar y dijo

—con que aquí estabas, no me acordaba de tú existencia. 

El collar con tantos recuerdos, un collar que había guardado ya por 6 años, el collar de su despedida, collar que le obsequió Park Jimin horas antes de su ultimo adiós.

—no puedo creer que a pasar los años no puedo olvidarte— dijo acariciando el collar— me pregunto que será de tí, aunque no cumplieras todo lo que algún día me prometiste, quiero saber si eres Feliz— dijo con una embobada sonrisa.

—Que idiota soy— dijo susurrando para guardar el collar y en eso observó las demás cosas pero una carta en especificó, esa carta que no quiso guardar. La primera carta que le escribió por primera vez aquel chico terco y enamorado.

Y empezó a releer lo que contenía aquella carta

Hola Jungkook que tal?

Si te preguntas como es que me se tú nombre, ya que no quisiste decirme tuve que tomar otras alternativas, le pregunte al señor de la cafetería ^~^. Espero te encuentres mejor y que tú rasponsito ya esté sanando, se que no nos conocemos y mi deber era agradecerte por tomarte el tiempo anoche,

fue una agradable noche, bueno para mí lo fue gracias a tu compañía, hoy no me perdí y gracias a ti conozco un poco mas el lugar, es mí primera vez en Cambridge todo fue muy divertido, estuvieron deliciosas las hamburguesas de la cafetería y no digamos el batido me gustó mucho. de nuevo Gracias por todo espero y nos encontremos de nuevo.

Att: Park Jimin   

Jungkook dejó la carta aun lado dela cama y hecha su cabeza para atrás y dice en un tono para si mismo.
—si tan solo le hubiera prestado atención desde el principio lo hubiera disfrutado un poco más—

prosiguió a leer otra carta a lazar.

hola, Jungkookie

Espero y puedas arreglar tu bicicleta no quise dañarla pero, como soy yo el causante de toda la desgracia mañana te regalare una, un regalo por mi infortunio debí decirte que no sabia andar en bicicleta, pero de nuevo como siempre hoy gracias a ti aprendí dañe tu bicicleta pero estoy completamente agradecido por tú paciencia. Te esperó mañana en la cafetería necesito hablar contigo, por lo que paso hace pocas horas, descansa mucho.

Att: Park Jimin

Jungkook nunca entendió por que el chiquillo aquel siempre le entregaba una carta cada día, siempre se preguntaba si los chicos ricos hacían eso con cada persona que los ignoraba, los primeros días el chico era como un acosador llegaba a la cafetería todos los días a pedir lo mismo hamburguesa y malteada de fresa y al finalizar de comer cuando Jungkook se encontraba al otro lado de la barra le entregaba siempre una dichosa carta.