Meet Me In The Woods || Jicheol / Jeongcheol

Capitulo 4.3: hemofobia

Yoobin y Mingyu algunas veces, simplemente por ser hermanos, recibían bastantes comentarios sobre que se parecían demasiado. No tanto físicamente, pero sí por su forma de ser.

Ambos lucían intimidantes pero eran muy tranquilos (aunque a Yoobin le gustaba menos el contacto físico que a Mingyu); ambos protegían a sus amigos a toda costa, sin importar de quién; y ambos le tenían miedo a la sangre.

Su tía, Handong, los había llevado de visita una vez al hospital, y todo había salido desafortunadamente mal cuando, por accidente, una enfermera se había cortado y la sangre comenzó a salir.

Soobin y su tía apenas los habían podido calmar.

A partir de ese momento era una odisea convencerlos de ir a la enfermería de la escuela cuando se sentían mal o de ir al hospital cuando se lastimaban (ya que ambos practicaban deportes). ¿Vacunas? Ambos siempre terminaban desmayados.

Fue por eso que no se pudieron haber imaginado que, después de dar media vuelta para intentar huir de la plaza, terminarían pareciendo protagonistas de alguna película slasher.

Ellos tampoco tuvieron que imaginarse estando en otro lugar, ni siquiera flotando en el aire. Su terror comenzó con los pies en la tierra, y cuando empezaron a sentir algo extraño en su piel.

Yoobin estaba a un lado de Beomgyu, y ambos miraban hacia sus dos amigas, que ya comenzaban a actuar un tanto extraño, pero cuando estaba preguntándoles qué les pasaba, preocupada porque Jihoon ya estuviera atacándolas sin que ellos pudieran ayudarlas, sintió un extraño escozor en su piel.

Quiso dejarlo pasar, quizás podría tratarse de alguna alergia, pero cuando sus brazos ya empezaron a arder, inconscientemente llevó sus ojos hacia ellos. En realidad no pudo verlos porque éstos se encontraban debajo de su suéter. Pero fue el líquido rojo y espeso que detectó escurriendo de sus dedos lo que la hizo interrumpir sus palabras y abrir sus ojos desmesuradamente.

Dejó de prestarle atención a todo lo demás, incluso a sus amigos. No supo si Beomgyu estaba viendo lo mismo que ella o si seguía a su lado siquiera, en lo único en lo que pudo concentrarse fue en lo que pudieron ver sus ojos cuando sus manos, de manera temblorosa, subieron ambas mangas de su suéter.

Hileras e hileras de pequeñas pero incómodas y dolorosas cortadas por todas partes, de las cuales escurrían hilos e hilos de sangre, sin detenerse.

El dolor ni siquiera le importó en ese momento, tampoco el preguntarse si la cantidad de sangre que estaba saliendo de su cuerpo pronto la mataría; lo único que pudo hacer fue seguir viendo aquella escena, mientras sus pies trastabillaban hacia atrás, perdiendo el equilibro y cayendo al suelo.

No era consciente de que no estaba respirando pero sí sudando, la chica seguía arrastrándose entre temblores en el suelo, dejando un camino de sangre detrás de ella, como si estuviera intentando huir de la sangre. Su mente no estaba funcionando correctamente por lo que, cuando se dio cuenta de que la sangre seguía ante sus ojos, perdió el control.

Con desesperación llevó sus manos a los brazos y comenzó a intentar quitar aquel líquido de su piel. Su miedo era tan intenso que ni siquiera le importo el dolor que sus manos le estaban proporcionando a sus heridas, lo único que quería era que todo aquello se detuviera, que ese espantoso color desapareciera de su vista.

Sabía lo que se avecinaba después de aquella reacción, sabía que no iba a tardar mucho en perder el conocimiento, pero eso no le interesaba, sólo quería quitarse la sangre que seguía saliendo y que ahora llenaba sus manos por completo.

Los ojos de Yoobin se abrieron de par en par, moviéndose como desquiciados de un lado a otro.

Sus pulmones pedían aire, pues incluso cuando la chica había respirado un poco mientras intentaba limpiar sus brazos, no era suficiente debido a su errática respiración.