•『 ✶ Remediar ✶ 』•

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Minho cortaba la fruta con cuidado de no cotartarse, mientras Jisung luchaba con los huevos y el tocino.

Claramente la cocina no era lo suyo, pero estaba dando lo mejor de él, y trataba no morir en el intentó.

——Si quieres puedo cocinar yo eso, y tú cortas la fruta ——sugirió Minho, al ver a Jisung con una toalla cubriendo sus brazos, y acercándose con miedo al sartén.

——Yo... no sé hacer nada ——dijo frustado, mirándolo con un puchero.

——Hey, no digas eso. ——Minho dejó de cortar la fruta, y se acercó a él, quitándole lo que tenía en las manos——. No era necesario que me ayudes, solo te dejé porque tú lo propusiste, pero yo puedo hacerlo solo.

——Pero... No quiero dejarte hacer todo a ti, me hace sentir inútil... No puede ser que no pueda contra unos tontos huevos y un idiota tocino.

Minho soltó una suave carcajada por las palabras del menor, nunca había escuchado que insultaban a la comida.

Sonrió, y con su mano acarició la mejilla de Jisung, lo cuál causó que el rubio lo miré sorprendido por la acción.

——No te preocupes, lindo. Dejaque yo me encargué de la comida, deja que te consienta, ¿sí?

El modelo asintió con un poco de timidez, siendo hipnotizado por la bonita sonrisa que le estaba regalando Minho, y dejándose atrapar por la linda sensación que le causaba el tacto de el pelirojo.

——Puedo preparar el café o un jugo ——propusó Jisung.

——Está bie... ¡No!—— Minho dejó de acariciar la mejilla de Jisung, y rápidamente sacó lo que se estaba cocinando en el fuego——. ¿Tienes más huevos y tocino?

Jisung asintió mientras sonreía.

¿Por qué se sentía tan a gusto con Minho? No le molestaba la sensación, pero sí le daba miedo que esas sensaciones se vuelvan más intensas, y se transformen en algo que quizás pueda lastimarlo.

——Cuando te quedas mirando a un punto fijo sin decir nada, me da miedo —— comentó Minho, sacándole de sus pensamientos.

——Lo siento, es que yo... Minho, yo, quiero saber si cuando yo me mejore, ¿tú te irás?  ——cuestionó, temiendo por respuesta.

Ni siquiera sabía porque le angustiaba la idea de que Minho se marché, o bueno, quizás ya se había acostumbrado a las emociones tan lindas que le hacía sentir Minho, y saber que en algún momento él se iría, lo entristecía.

El pelirojo puso los huevos en los platos, y acomodó los tocinos arriba de estos, dejó los utensilios y limpió sus manos, para después acercarse un poco más a Jisung, y con su mano, levantar el mentor del menor.

——Yo no me quiero ir de tu vida, así que la respuesta es no, mientras tú me permitas quedarme, yo estaré.

Y ahí estaba de nuevo, esa sensación tan linda, acompañada por el sentimiento de sentirse protegido y cuidado.

Minho le sonrió, y Jisung le devolvió la sonrisa, cerrando sus ojos y mostrando sus ensias, decidiendo confiar nuevamente, cerrar los ojos y sonreirle.

La sonrisa tan genuina de Jisung hizo derretirse al corazón de Minho, y se sintió feliz por el simple de ver a Jisung bien.

Después de unos minutos, terminaron el desayuno, y se sentaron en la mesa, para poder disfrutar de la comida.

——Cocinas increíble ——elogió Han.

——Estuve aprendiendo un poco de cocina en esto últimos meses, es por eso.