Addicted | [Michaeng] G!P

Chapter XXVIII

Mina observaba a Chaeyoung estupefacta. Sentía como poco a poco la temperatura de su cuerpo descendía, como sus manos antes tiernas entre las contrarias se alejaban de su toque mientras parpadeaba tratando de entender. ¿Ella se iría?

  - ¿V-Vas a irte?- la mayor trató de formular oraciones coherentes pero sólo podía pensar en que Chaeyoung se iba, ¡se iba lejos de ella! - ¿A dónde te irás Chae? ¿C-cuándo?- intentó no mostrarse débil, pero no quería perderla. Chaeyoung tomó nuevamente sus manos, las acarició buscando tranquilizarla, y sonrió, acercándose a la mayor.

  - Yo no.. me siento cómoda con nuestra situación, mi situación- negó ante su falta de elocuencia. Su respiración y aliento dejaban un evidente humo en el ambiente, el frío les había llegado sin precedentes y Chaeyoung sabía que la temperatura seguiría descendiendo. Y no sólo en el ambiente. - Solar ha estado buscándome, y los hombres de Park no paran de seguirme- Mina frunció el cejo, ¿cómo que la habían encontrado? ¿Aún la seguía buscando? Y peor aún, ¿cómo que la estaban siguiendo? Negó y se paró firmemente sobre la ahora húmeda tierra debajo de sus botas. 

  - No me digas que la loca de tu ex se encontró con Solar, eso sí sería un auténtico fallo del universo en nuestra contra-. Chaeyoung intentó no reír ante la ironía del comentario de la mujer, pero aunque era un tema serio, soltó una risilla. Después acomodó su tullida bufanda con una sola mano. - Vamos Chaeyoung, realmente está loca- Chaeyoung alzó sus manos y le restó importancia al asunto, intentado dejarlo atrás.

  - Créeme que lo sé, pero quiero pensar que aún guarda un poco de cordura en ella- Mina le dió una mirada sugerente, - Vamos, ella era una chica muy dulce- - Hasta que apareciste en su vida- bromeó Mina sonriendo, pero a Chaeyoung no le dió gracia, sabía que había lastimado mucho a Rosé, tanto que no quedaba rastro de la dulce y amorosa chica que algún día fue. Rosé era ahora una mujer seria y fría, que guardaba mucho rencor en su interior.

  - Yo..- Mina intentó disculparse, pero Chaeyoung negó, haciendo que la mayor se detuviera. Sonrió para ella misma mirando el suelo, sabía que se había convertido en alguien que todos odiaban, que ella odiaba, pero buscaba mejorar.

  - Sé que yo tampoco soy inocente en todo esto, las lastimé muchísimo, y nunca quiero volver a hacer algo como lo que les hice a ellas- murmuró, mirando sus pies y jugueteando con sus manos. Mina la observó, sabía que se sentía muy mal y odiaba verla así. Suspiró. El aire frío corría libremente entre ellas y solo podían abrigarse con sus prendas mientras que el cielo comenzaba a nublarse, era probable que una tormenta comenzara pronto. La japonesa acomodó su abrigo y observó unos momentos a Chaeyoung, que seguía con su mirada en el suelo.

  - ¿Cuándo nos vamos?- dijo finalmente Mina después de unos minutos. Chaeyoung se irguió en su lugar y sonrió en cuanto la escuchó. Mina sonrió ante la actitud de la chica.

  - Cuando tú me digas- Mina alzó una ceja y la menor alzó sus manos, buscando explicarse. - Tengo casi todo listo para irme.. Para irnos- suspiró y la observó a los ojos. - No quiero que tengan oportunidad de hacerte daño-, Mina tomó su mano y la acarició. No dejaría que Chaeyoung se preocupara por su bienestar, de ahora en adelante dejaría de ser una víctima, ahora defendería a Chaeyoung frente a todo y todos.

  - No te preocupes por mi Chae- Chaeyoung entrelazó sus manos y las observó, encajaban perfectamente. - Deja que arregle todo y podemos irnos mañana por la noche- la menor la observó sonriendo y asintiendo. Al fin podría estar con Mina, al fin podría ser feliz con ella.

Bajaron de la pequeña montaña tan lento como subieron, ahora tomadas de la mano y sonriendo, regresaron al auto de la mayor y subieron.

El camino de regreso fue rápido, Mina dejó a Chaeyoung en la casa de su amiga y salió rumbo a su departamento. No sin antes recalcarle que tuviera cuidado con esas mujeres, y que cerrara bien la casa. Se despidieron con un tímido beso y esperanzadas en que pronto estarían juntas y lejos de sus problemas.