Día 1 [Classyrebel]

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Tema: Eye contact/ Contacto visual

Pareja: Serena x Gladio (Classyrebel)

— ¡Denle la bienvenida a la señorita Serena!

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— ¡Denle la bienvenida a la señorita Serena!

La chica de Kalos brilló como siempre lo había hecho. Junto a su nuevo Pokémon, Altaria, la muchacha alzó el vuelo y dio vueltas mientras la espora algodón de su majestuosa ave caía y explotaba por las rocas afiladas de Pancham. Cuando bajó, en una perfecta voltereta guiada por los lazos de Sylveon, llamó a Braixen y utilizó su ya tan conocido número de atrapar la vara en llamas de su inicial. Rodeados por las rocas en un círculo brillante, ella y sus Pokémon bailaron en sincronía, riendo, como si no estuviesen ahí, mostrando así lo feliz que Serena era cada vez que realizaba una presentación. Durante su acto daba leves vistazos a la multitud, deseosa de saber que el público de Hoenn, quienes nunca antes habían presenciado un performance en vivo, se deleitaran con su número. Pudo notar miradas alegres, sorprendidas y maravilladas, llenándola de felicidad; sin embargo, entre toda la multitud logró divisar unos ojos en particular que llamaron su atención: cansados, desinteresados, como si hubiesen llegado ahí por alguien más y no por voluntad propia. Aun así, quedó cautivada, pues no había notado unos ojos tan verdes y hermosos en su vida, ¿cómo se verán cuando observa algo que le cause emoción? Serena apretó sus puños, dispuesta a lograr su cometido: lograría apreciar esos ojos brillar.

— ¡Deleitemos a nuestro público!

Las rocas desaparecieron y ella movía la vara dando la forma de un círculo mientras Sylveon esparcía su brillo mágico. Serena buscaba esos ojos esmeraldas con mucha ilusión, ¿cómo estaría ahora? ¿lo hizo bien? Quería alegrarlo, darle un buen sabor de boca, demostrarle que esa noche podía divertirse incluso si es que su primera intención no era estar ahí, viéndola. Con la multitud gritando de jolgorio por saber cuál sería su siguiente movimiento, al fin pudo notarlo: fue una chispa, tan efímera, que casi la hace retroceder de la impresión. El verdoso mirar se agrandó, fijos en el fuego de la rama. Serena quería que siguiese así, que se deleitara con su actuación hasta que cesara.

Entonces, por un instante, sus ojos se encontraron. Tembló, maravillada de que por fin la viese a ella con esa emoción que intenta cada día poder lograr con todo el público. No entendía por qué esos ojos le transmitían más que cualquier otros que hubiese visto anteriormente, pero no pudo evitar pensar en la idea de querer seguir apreciando dicha mirada tan llena de sentimientos por revelar.

Finish!

Momentos después, cuando la pelimiel estaba lista para regresar a su hotel, fue interceptada por dos personas con el mismo color de ojos que aquel muchacho. Las que creyó eran madre e hija la felicitaron y agradecieron por tan deslumbrante actuación, mientras Serena les sonreía de forma avergonzada. Sí, sus ojos eran esmeraldas brillantes, pero no eran las de él.

— Gladio, no seas tímido: ¡saluda a la señorita Serena también!

La persona a la que aquella adulta llamaba apareció a unos pasos detrás suyo. La performer entonces mostró su mejor sonrisa para agradecerle, pero se vio interrumpida cuando sus ojos volvieron a encontrar las esmeraldas misteriosas de hace unos instantes. Estos volvieron a ser fríos, sin embargo, continuaban igual de hermosos.

— ¡Espero que la presentación haya sido de tu agrado! — fue lo primero que mencionó la pelimiel cuando alzó su mano para que la estrechara.

— Estuvo bien. — respondió él, con una media sonrisa, mientras Serena notó nuevamente ese brillo.

Su corazón brincó alegre.

¿Por qué le gustaba tanto esos ojos? No eran diferentes al de los demás, sin embargo, se sentía muy contenta de verlos así. Aunque no lo conociera de nada, podía sentir una conexión con él.

¿Podía seguir viéndolo por un momento más?

— ¡Uy! Creo que ya es hora de irnos. Debemos continuar con nuestra búsqueda. Lillie, Gladio... ¿Gladio?

Pero ambos jóvenes seguían perdidos en la mirada del otro, solo ellos dos, como si esas miradas fueran hipnotizantes, como si no hubiera necesidad de más.

— Tus ojos... Me gusta el brillo que desprenden. — musitó Serena, sin poder apartar la vista de él — Cuando noté que te interesaste realmente por mi presentación, yo... me sentí muy feliz de llegar a ti.

«No me importaría que me sigas viendo» pensó la joven, aún hipnotizada.

¿Hizo bien en dar ese halago? No importaba: poder ser capaz de volver a ver esos ojos era suficiente para ella.

— Gracias, supongo. — continuó él, aún mirando fijamente a la pelimiel.

— Si Serena desea, podemos darle un aventón hacia la siguiente ciudad. — esa frase fue suficiente para que ambos jóvenes volvieran a la realidad y se soltaran, aun extrañados pero fascinados con tal único momento.

— ¿Lo dice en serio, Lusamine? — la ojiazul no podía creer la oferta que estaba recibiendo.

¿Podría seguir contemplando esos ojos? La sonrisa en Serena no se hizo esperar. Las familiares de Gladio fueron conscientes de esto, así que sonrieron divertidas.

— Si no quieres aceptar no te preocupes, no quiero incomodarte. — dijo el ojiverde, lo suficientemente bajo como para que solo Serena lo escuchara.

— ¡N-no lo haces! Me harías un favor, de hecho. Mi concurso es pronto y demoraría más a pie.

— Decidido entonces. — la mayor del grupo abrazó a cada uno y se adelantó junto a su hija, quien volvió a felicitar a Serena por su acto — ¡En marcha!

— Gracias, muchas gracias. — ella dio una leve reverencia.

Gladio las siguió pero, antes de acercarse a sus familiares, dio una vuelta y volvió a mirar a Serena, sonriéndole vagamente mientras sus ojos brillaron una vez más para ella.

— Eres buena en eso de los performance. — la voz del rubio también era igual de hermosa, Serena se encontraba en el paraíso de tan solo escucharlo — Y tus ojos: ellos brillaban mucho durante toda tu actuación, perdón si me quedé viéndote de más.

La joven entrenadora respondió con una gran sonrisa mientras corrió a su lado, feliz de poder ser capaz de apreciar esas esmeraldas cautivantes por unas horas más.

La joven entrenadora respondió con una gran sonrisa mientras corrió a su lado, feliz de poder ser capaz de apreciar esas esmeraldas cautivantes por unas horas más

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¡Primer día! Sé que no es tan fluff pero me gustó la idea y tenía que escribirla xD era más largo así que lo edité lo mejor que pude. Aparte, es el primer classyrebel que escribo y estoy satisfecha con mi trabajo cx 

Nos leemos mañana!!

Como Luvdiscs en el mar [FluffTober 2021]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora