🏁El Rey sin corona🏁

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Chihiro no supo como llegó a la oficina.

Lo único que tenía muy presente era el punzante dolor de cabeza que lo atormentaba.

Fué el centro de atención de todo el banco. Su aspecto, sabía que no era el mejor y que seguramente sería fuertemente regañado por su jefe.

Por suerte, este aún no había llegado.

Tuvo un par de minutos para arreglarse un poco y parecer más..."normal" para recibirle como habitualmente hacía.

Cuando el castaño entró, hizo todo lo posible para no demostrar el intenso dolor que azotó su cráneo en el momento en que la puerta rechinó. Joder, tendría que pedir que la aceitaran.

-...Chihiro...—Llamó, haciendo que voltease a verlo—...Estás hecho una mierda...—Sonrió de lado.

Maldición.

-...¿Tanto se me nota? —Suspiró pesado, dejando de fingir.

-...Para nada...—Negó y se sentó tras su escritorio—...Pero, los demás no dejaron de murmurar sobre "el horrible aspecto de Mayuzumi-San" de hoy...—Se burló—...¿Tan buena fué la cena que pareces estar muerto en vida? —Con un ademán de manos lo invitó a sentarse.

-...Fué intenso. Solo eso...—Sus dedos acariciaron su punzante sien—...Lamento no llegar anoche.

-...Ñeh, no le prestes atención a eso...—Hizo un ademán de manos y le entregó el café que había comprado para él—...¿Al menos te folló adecuadamente?

Mejor que aún no bebía aquello, porque de seguro se hubiese ahogado.

-...Furihata-Sama...Eso no se pregunta...—Haloneó su corbata. De pronto se sentía algo sofocado.

-...Solo era curiosidad...—Bebió de su café—...Además, puedo mandarlo a matar si no satisfajo correctamente a mi mano derecha...—Le miró de reojo—...Pero, por tu reacción, fué mejor de lo que esperabas ¿Verdad?

-...Me sorprendió...—Admitió, cerrando sus ojos un momento—...Además, su pene es bastante grande. Sería un desperdicio quitarle la vida.

-...Vas a volver a acostarte con él...—Rió un poco—...No te voy a detener. De todos modos, son prometidos ¿No?

-...Se supone que así es...—Suspiró pesado y bebió de su café—...Pero no quiero nada que ver con un rey sin corona.

-...¿A qué te refieres? —Enarcó una ceja.

-...¿Alguna vez conoció a alguien que parece tan...no sé, dotado de talento que piensa que es uno de los grandes, pero de pronto se da cuenta que no es así? —Preguntó, el castaño pensó un poco para luego negar—...Pues eso es lo que considero un rey sin corona.

-...Ya veo...—Asintió, comprendiendo—...Pero ¿Entonces porqué...?

-...Conoce a Akashi Seijuuro...—Dijo, haciendo que el contrario abriera sus ojos grande—...Me habló muchas cosas de él, sin embargo, parece que aún se guarda lo más importante...—Hizo una mueca—...Pienso ganarme su confianza para que me cuente hasta sobre las misiones que tienen asignadas.

-...Eres despiadado, Chihiro. Eso me gusta...—Sonrió de lado—...Otra cosa. Si te sientes muy mal, ya sabes, la resaca y el dolor de culo...—Rió al verlo ahogarse con su bebida—...Puedes tomarte el día libre.

-...No, no...—Negó de inmediato—...Ya me conoce. Si no me mantengo en movimiento...

-...Si, si, te vuelves demente y matas todo lo que está a tu paso...—Rodó los ojos—...Me haces recordar el día en que te contraté...—Rió bajito—...¿Cuantos fueron? ¿Diez? ¿Doce?

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