🏁Frenético🏁

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Advertencia: este capítulo tiene escenas hot del Niggamine (Φ ౪ Φ) si hay derrames nasales o algo más, no es mi culpa, sino de su sensualidad. Disfruten~ (͡° ͜ʖ ͡°)

-...¿Qué quieres? —Gruñó, bajando una mano al arma que llevaba en su espalda baja, sin que el contrario lo notase.

O eso creía él.

-...Pues...

Aomine sudó frío. La sonrisa del castaño no le daba un buen augurio.

La oscuridad no demoró en nublar su visión. Paso tras paso, sentía que el ambiente cambiaba hasta llegar a una zona en donde un intenso olor picó en su nariz.

-...¿Dónde...?

-...Shhhhh...Aún no llegamos...—Oyó un par de risillas y los manoseos a su cuerpo no demoraron en llegar ¿En dónde estaban? ¿A dónde iban? ¿Porqué seguía con vida?

Ahora tenía sentido todo. El olor que picaba en su nariz era del alcohol que circulaba a su alrededor, aunque había otro que no lograba identificar.

De pronto, cayó sobre algo suave y aquello que bloqueaba su visión, desapareció. Le costó un poco acostumbrarae a la luz, mas cuando lo logró, enarcó una ceja.

Una habitación.

Se irguió en su lugar, se cruzó de brazos y piernas, y miró todo con atención, tratando de identificar el lugar en donde se encontraba.

-...No quiero, gracias...—Gruñó y negó el vaso que el contrario le ofrecía.

-...Si crees que está envenenado, te equivocas pues no lo está...—Sonrió ladino la mesita central, mientras tomaba asiento frente a él.

-...Esto es extraño...—Gruñó a la defensiva—...¿Porqué traer a un policía aquí? Creí que ustedes, los que son del bajo mundo, eran más inteligentes. Puedo notar que estaba en lo incorrecto.

-...No, no lo estás...—Sonrió y tomó un sorbo de su bebida—...Este lugar es una de mis tantas güaridas y por lo que debes suponer, hay una seguridad muy alta, todo para asegurar mi protección.

-...No has respondido mi pregunta ¿Para qué me trajiste? —Gruñó y bajó una mano a su cintura, palmeando la zona, notando que su arma no se encontraba ahí.

-...No pensaste que te íbamos a dejar armado ¿Verdad? —Rió escandalosamente—...Cariño, te he traído para negociar.

-...No hago tratos con personas corruptas...—El tono ácido en sus palabras fué divertido a oídos del castaño.

-...¿Sabes? El jefe estaría encantado si yo te aniquilara...—Murmuró y se levantó, dejando ver su ¿Traje? Eso ni siquiera podría considerarse un traje. No era el que llevaba cuando se lo topó, minutos antes—...Pero...tengo mejores planes para ti.

Otra vez sintió aquellos escalofríos en su columna.

¿Miedo? No, él no sentía miedo...Entonces ¿Porqué? ¿Porqué llevarlo ahí? ¿Porqué no asesinarlo si era lo que su acholatada mirada gritaba?

¿Qué tenía planeado para él?

-...Ve directo al grano. Si vas a matarme, no te lo voy a poner fácil...—Gruñó en tono de advertencia.

-...Matarte...Suena tan tentador...Pero, primero me gustaría jugar contigo. Divertirme antes de eliminarte, cariño~ —Dijo y cruzó una de sus piernas, dejando a la vista su rosada entrada punzante y húmeda.

Aomine tragó saliva y desvió la mirada de esa zona ¿Qué clase de vestimenta era la que dejaba prácticamente todo a la vista?

-...Idiota ¿Acaso eres un gato? —Le miró con disgusto, mientras movía su pie con insistencia. Trataba de no mirar ahí, pero no lo estaba logrando.

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