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Milenka

-¿que Milenka qué?

El corazón se me quiere salir del pecho a punto de darme un mini infarto.

Todos sabemos que el tío Patrick es un chismoso y le encanta estar revoloteando en las cámaras de la central. Miro a Owen que me mira igual de pálido que como debo estar este momento.

-¿y por qué mierda no lo puede hacer tu hija?- suelta papá en un tono frío y le relajo al ver que no es lo que yo pensaba que era- que yo sepa también es una teniente, y está preparada para hacer trabajos de encubierto...no me jodas entonces, y nadie usa esa mierda, si total- no da tiempo y cuelga, centra su atención en mí- si aceptas llevar la droga del demonio en tu cuerpo, te voy a mandar a recoger los escombros que quedaron en Gehena- me amenaza y niego, ya que Gehena fue destruido con una bomba de plutonio, y no pienso exponerme a esa mierda

- yo no estoy loca, además, no confío en él y en las intenciones que pueda traer con esa porquería- le digo al cabezota y me llevo el jugo a los labios, calmando la sed que me entró con el susto.

- yo solo te advierto, que aquí todo tiene consecuencias, y no los quiero a ninguno de los dos relacionado con ese animal domesticado

- ni nosotros queremos tener algo que ver con él- habla Owen y le sonrío con comprensión, ya que es el que más ha sufrido por culpa del maldito Antoni Mascherano - y por cierto, le prometimos a Lucian una visita de su hermano, para que vea en donde va a parar si decide traicionarnos

Papá lo mira con orgullo por lo que dice mi hermano. Termino de cenar con los dos hombres de mi vida y luego nos vamos todos juntos a la mansión.

Estoy en la oficina del cabezota trabajando con él en unas tareas pendientes cuando no aguanto más.

- quiero ir a Rusia, ¿cuándo me vas a dar permiso?

Me mira con cara de obviedad y se cruza de brazos detrás de su escritorio.

- cuando se te baje la calentura, o sea, nunca- abro la boca presa de la rabia

- ¡si hubiera sido a Owen al que hubieras cogido follando le hubieras aplaudido!- le grito y me pongo de pie- siempre es lo mismo, estoy cansada de que me trates como una puta niñata, ¡ya no más!

-¿ y qué harás para evitarlo? ¿Una perreta? Medícate

- me voy de esta casa, me mudo de aquí, y si no me das permiso para viajar me cuelo en cualquier aeronave de la central que valla rumbo a Rusia

Salgo a grandes zancadas y lo escucho gritarme a mi espalda que me detenga. Pero no lo hago. Hace cuatro meses me cogió follando con un chico de la Bratva, y luego de desaparecerlo, me quitó los permisos de viajar, por lo que no he podido visitar más a mi prima ni ir a nuestra hermosa mansión de allá.

Tomo mi mochila con algunas cosas y me salgo por el patio trasero. Cruzo la tapia por una esquina que no está vigilada y salgo corriendo por toda la calle hasta que llego a la avenida y tomo un taxi.

Hace seis meses compré un departamento para que sea mi refugio en estos casos. Doy la dirección y pago cuando llego. Es un departamento enorme, como me gustan, con  paredes de cristal blindado que de a la enorme ciudad. En la esquina de la calle hay un antro muy frecuentado y no pienso perder la oportunidad de ir. Tomo mi celular y le marco a la chica que más tolero en la ciudad, me responde al tercer timbre.

- ponte bien guapa que un antro nos está esperando- le suelto

- joder, justo lo que necesitaba, mándame la dirección y nos vemos en media hora

Mellizos Morgan: Fanfic Pecados Placenteros. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora