Mellizos Morgan: Fanfic Pecados Placenteros.

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Milenka

Estar en el mundo de los criminales, rodeada de ellos, interpretando a uno, me saca el lado dominante y sanguinario que me pide acabar con todos los presentes y presumirlos como trofeo.

Mi cuerpo se balancea de manera atrevida, enfundado en un vestido y unas botas que me hacen sentir muy muy puta. Aparte, las miradas lascivas y cargadas de morbo que me dan los tipos aquí reunidos me eleva el ego.

- ...y escuché por ahí que están iniciando en el mundo de la droga- me habla Alonso, el mano derecha de Héctor.

- así es, pero solo estamos interesados en mercancía de primera- me termino mi copa y le guiño un ojo- hay que mantener a las putas contentas y qué mejor incentivo que un buen producto.

- creo que ha llegado al lugar indicado- el coqueteo es más que evidente, y lo bueno es que es agradable a la vista. Piel blanca, ojos café, cabello negro y desenfrenado, altura notable y espalda ancha

- eso espero, porque no viajé desde Rusia para irme con las manos vacías

Me encanta el tono dominante y la mirada atrevida que le doy a todos. Me ha sido fácil asumir a Irina, porque es una zorra desalmada igual que yo.

- pues junto a Héctor estábamos deseosos de que asistieras, ya que te tenemos una oferta que no podrás negar

Su seguridad me encanta, ya que demuestra que hasta ahora el juego está a nuestro favor.

- siempre y cuando sea una propuesta indecente, no tengo inconvenientes- le sonrío, pícara.

- él aún no llega pero te puedo dar un tour por la fiesta

Su sonrisa de medio lado me tenta y le tomo del brazo que me extiende.

- voy a pensa que es un tour y no por presumirme

- me has agarrado- levanta la otra mano como di hubiera sido atrapado en algo.

Nos movemos por el lugar y me va presentando a los protagonistas del mundo de las sombras. Muestro indiferencia frente a ellos ya que al final de la velada la mayoría va a estar tras las rejas, o con un tiro en la frente, porque esta misión también es una limpieza a la sociedad. Lo que no sirve se desecha.

Llegamos donde Harry y la ex de Owen, que andan con ropas elegantes y enseguida su atención va a nosotros. Su papel es el de un hombre joven, alemán que trata con los españoles de manera cibernética.

- Irina, permíteme presentarte a Alaric Cantor, viene desde alemania, y a su asistente Nixie.

Le sonrío a mi mirenito y a la zorra ni la determino.

- un placer conocerla- me besa la mano y lucho por no dejar salir una carcajada. El acento alemán lo remarca al igual que yo el ruso, y esa es la ventaja de hablarlos desde pequeños.

- el placer es todo mío.

- le estaba comentando a la señorita Koslova que esta noche le podemos ofrecer una mina de oro- habla Alonso y juega con el enorme aro de este mineral de mi oreja.

- tecnicamente solo escuché sobre una propuesta indecente, no sobre una mina de oro, pero si es así, entonces lo pensaré muy poco

Karina me echa miradas cargadas de veneno las cuales me paso por lo profundo de mi alma. En la lejanía veo a Owen salir de un salón oscuro con Abby atrás, toma las escaleras al segundo piso y noto lo apretado que lleva el pantalón. No puedo evitar sonreír, ya que mi amiga lleva las tetas marcadas por la fina tela de su vestido.

-¿te gusta tanto el oro? Porque lo mencioné y se te escapó la sonrisa más macabra y hermosa de la noche- los dedos del español jugando en mi hombro me hace moverme sin ser brusca hacia donde Harry, y pegarme de su brazo.