Mellizos Morgan: Fanfic Pecados Placenteros.

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Abby

Los ojos grises de la teniente Morgan me han perseguido toda la semana. Sé por el lazo tan fuerte que tiene con su mellizo que ya sabe que nos estamos revolcando. No digo nada, ella tampoco lo hace y todo este jodido lío me pone de los nervios.

Me muevo en dirección a la cafetería y la siento a mi lado en menos de un minuto. Es tan jodida como el ministro, y no sé cómo es que la aguanto.

-¿me vas a decir de una vez por qué me miras extraño estos días?- una sonrisa de víbora ponzoñosa aparece en sus labios y me tenso porque sé que nada bueno saldrá de su boca

- yo no te miro extraño, cuñadita- una mueca sale de mis labios por el término. Siento mis mejillas arder por la vergüenza y avanzo más rápido para evitar que me vea.

Imposible. A Milenka Morgan mada se le escapa.

-¡pero si te sonrojas y todo! Linguini, no tengas miedo que a ti no te voy a romper la cara- se me adelanta y queda frente a mí. Lo dice porque no hay una cuñada a la cual no haya golpeado a punto de romperle hasta la madre- claro, siempre y cuando no hagas sufrir a mi hermanito- entrecierra sus ojos grises al punto de intimidar- me estás entendiendo cuñada

- no soy tu jodida cuñada- le aclaro y pedimos bebidas calientes en la cafetería para ir a una mesa- que follemos de vez en cuando no nos hace una pareja.

La pelinegra me da una mirada de incredulidad y rueda los ojos.

- claro, porque el hecho de que se pasen el día cogiendo como conejos es por mero gusto y no porque se tienen ganas desde hace años, y el que se tiren miradas cargadas de morbo tampoco es nada serio

- claro que no- me defiendo a la defensiva. Si le sigo escuchando sus locuras terminaré por creerlas, y no quiero ser una más del montón que se enamora de Owen para que el me deje cuando se aburra de hundirse en mi vagina- es solo sexo, vale, lo mismo que haces tu con cuánto hombre se te pare al lado.

Su risa sale natural y de manera aterradora. Me encojo en el asiento y varios soldados fijan la vista en nosotras.

- yo al menos cojo sin compromiso, y no niego sentimientos que son más que obvios para media central, incluso el cabezota lo notó

Mis ojos se expanden por sus palabras. Si Christopher sabe que me cojo a su hijo entonces papá puede estar al averiguarlo, y no estoy segura de su reacción, ya que no ha sido un suegro normal para ninguno de mis ex novios.
¿Suegro? ¿En serio dije suegro? Por Dios, ni que me fuera a encular con Owen.

- no te estreses mujer, que entre papá y yo se lo hemos ocultado a mamá, pero al menos, se un poquito más sutil y no me marques a Owen, por favor, que a mamá no le gusta ver a su niño marcado como caballo

Paso su comentario por alto. Cuando tengo a su hermano mi boca solo pide más y no encuentra límites. Mi parte ninfómana se manifiesta y el salvajismo se hace presente cada que nos vemos.

- que la advertencia sea para él también- le digo y me mira divertida, ocultando una sonrisa tras la taza de chocolate- que no he podido usar escotes estos días

- por si no lo sabías hay algo llamado maquillaje que cubre los chupones

Me dice con diversión y Samira se sienta con nosotras con una bandeja de aperitivos que Milenka no duda en atacar. Estas dos tragan cono cerdas y se ven como diosas, qué injusta es la vida.

- la que se tire a tu hermano sin un puto preservativo es una descerebrada- la apunta la recién llegada y a mí se me atasca el líquido caliente en la boca- lo acabo de ver coqueteando con la sargento De Luca