coffee twelve

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La semana pasó lenta y extremadamente aburrida mientras esperaba con todas mis ansias el viernes. Gwen había calificado con un B en geometría, con lo cual estaba feliz porque podía pasar la materia y no tendría que ir a la escuela de verano. Yo había recibido mi nota del exámen de química y para mi suerte había aprobado. Tony jugó con el equipo un partido más contra los del Fowerd High School, y perdieron. Sin embargo, no pudo ponerse lo demasiado depresivo ya que en esa misma semana lo llamaron para audicionar y quedó en un equipo de ligas mayores y sabía que a eso quería dedicarse el resto de su vida: al fútbol americano.

Cuando llegó el viernes, fuí al colegio algo cansada y con la mente lo demasiado ocupada por Niall como para pensar en qué tema estábamos dando en biología o que Tone me tiró alrededor de diez papeles de los cuales no me percaté para nada.

Al llegar el almuerzo vimos como el director, un hombre rechoncho y petiso, venía hacia la cafetería con un altavoz en mano. Cuando ya tuvo lugar dentro de ésta, tomó una silla y la puso en medio del establecimiento, luego se paró en ella y comenzó a llamarnos la atención por el altavoz para que dirijamos nuestra vista hacia él.

-Está más gordito- me susurró Gwen a mi lado. Vi como Tone hablaba con Justin al otro lado de la cafetería, en la mesa de los deportitas. Dirigí mi vista hacia el director al tiempo que éste comenzaba a hablar.

-Queridos alumnos del Instituto privado de Boston para hombres y mujeres, quería comunicarles que se encuentran disponibles los resultados de la votación para la reina y el rey del baile de fin de año del presente curso lectivo,- se escuchó como las porristas y las populares saltaban emocionadas y comentaban cosas sobre el baile, Gwen me miró con euforia y yo la miré seria. No me parecía nada bien eso de la reina y el rey del baile- y me alegro en comunicarles que la reina será...- miró su tarjeta y luego de un rato habló de nuevo-, la señorita Gwendolyn Bell.

Gwen saltó de sorpresa en su asiento y todos miraron en nuestra dirección. Las demás chicas del instituto nos largaban miradas de rabia y celos. Gwen estaba que lloraba.

-Y el rey será el señor Anthony Weber. Eso es lo único que tenía que comunicarles por ahora, gracias por su atención.

Miré en la dirección de Tone, que también parecía tan sorprendido como Gwen. Un sentimiento de soledad me inundó por dentro. Si ellos eran los supuestos reyes, tenían que ir al baile juntos, por consecuencia, yo me quedaría sin pareja. Lo cual era una desgracia pero a la vez un alivio inmenso ya que no tenía demasiadas ganas de asistir.

Al finalizar las clases, salí junto a Gwen del instituto, hablando sobre cuán raro había sido ser elegida para ser la reina del baile. Nos estábamos riendo como locas cuando lo vimos.

Gwen se paró en seco y miró fijamente al MINI Cooper negro estacionado al frente de la escuela. Apoyado en este había un chico rubio, vestido en unos jeans negros, una remera blanca, sus vans y un chaleco de jean. Llevaba unos raybans negros y daba la impresión de parecer un "chico malo".

-¿Ese no es Nilo?- escuché hablar a Gwen a mi lado.

-Niall- le corregí sin dejar de mirarlo.

-Wow, está realmente como un tren.

-Sí, lo sé- contesté, aún mirándolo-. Aunque no encuentro explicación de que se encuentre aquí.

-Tal vez te ha venido a buscar- dijo mi amiga sonriente.

-Eso es impos...- comencé a decir pero luego vi como agitaba su mano hacia mi y me llamaba por mi nombre. Gwendolyn se rió.

-¿No irás?- me preguntó mi amiga viendo que yo me había quedado pensando por mucho tiempo- ¿A qué esperas?

-Pero, entonces quién te acompañará a ti...

-Oh vamos Cam, que puedo ir sola, ya no soy una bebé en plan necesito que vallamos juntas a todos lados.

Me sonrojé y la miré con brillo en los ojos. Luego miré a Niall, que estaba parado contra su auto todavía, mirándome con una sonrisa y saludando a algunos de los chicos de los cursos más grandes.
Me coloqué la mochila al hombro, de nuevo y me dirigí a su auto.

-Hey, Niall, ¿qué haces aquí?- pregunté al llegar a su lado.

-Bueno, es lógico- dijo poniendo sus ojos en blanco-. Vine a buscarte.

Sentí como mis mejillas se coloreaban al instante.

Me miró de arriba a abajo y se sacó los lentes de sol. Sus ojos brillaron más que todas las estrellas juntas.
Movió su brazo y me rodeó con éste para luego conducirme hacia la puerta del copiloto. Sentí sus músculos contra mi espalda.

Dios, estoy que no respiro, cálmate Cameron, es sólo un chico abrazándota. Pero uno muy lindo, pensé.

Una vez que los dos estuvimos arriba de su carro, le pregunté:

-¿Cómo es que sabes dónde estudio? ¿Y por qué te has tomado la molestia de buscarme? No era necesario, ya sabes, tengo dos piernas, además me siento hecha un completo asco, ¿acaso no me ves? La ropa del institut...

-Cam- me interrumpió y luego se echó a reír. Cómo no, estaba siendo patética.

-¿He hablado muy rápido, no?- pregunté y me mordí el labio inferior-. Perdona, a veces no me controlo.

-Te ves demasiado linda cada vez que haces eso con tu boca- me dijo de repente.

-¿Qué?- pregunté sorprendida mientras seguía mordiendo mis labios.

-Eso. Eso que haces cada vez que te pones nerviosa. Lo llevas haciendo desde el otro día. Te muerdes el labio en plan soy una ardilla linda. Y lo mejor es que te sale bien, porque eres linda.

......

Siento que éste cap es una kk, por favor no me maten, es que estoy cero inspiración, espero que me entiendan.

Las ama,
Lulu.

Starbucks girl  ||n.h||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora