Era domingo 7 de octubre, el otoño se hacía más presente por lo que debía organizar mi vestidor y poner la ropa abrigada más a mano.
Bajé en bata a desayunar, pues aun traía el pijama y no quería cambiarme.
-Papá-manifesté en cuanto me senté en la mesa.-¿recuerdas que en un mes es mi cumpleaños?
-Por supuesto-dijo sin separar la mirada del diario.
-Bien, me gustaría adelantar mi regalo-llevé una uva a mi boca.
-¿Y qué quieres?-bebió café.
-Un millón de euros.-se atragantó. Me miró esperando que le dijera que era chiste- oh, no es broma-dije muy en serio.
-¿Y por qué una chica querría un millón de euros para su cumpleaños número 18?
-Inversiones-explique como si nada.
-Ya- volvió a leer el diario- lo pensaré en cuanto me digas que tipo de inversiones.
Revoleé mis ojos, realmente no quería decirle, sabía que pondría palos en la rueda, pero sin su ayuda me sería imposible juntar ese monto.
-Dejalo en 500...mil.
-Estaré en mi despacho por si quieres ser más precisa-bebió su último sorbo de café y se fue.
Me limité a bufar y a seguir comiendo, pensando en qué le diría, no podía decirle nada muy prometedor porque lo vería como una competencia y entonces se arruinaría todo mi plan.
Apareció Claudine en el momento en que me estaba levantando.
-Oh, no me vas a dejar sola ¿verdad?-preguntó apenada.
-Lo siento, tengo mucho que hacer.
-C'est dimanche- “es domingo” manifestó frustrada.
-Et nous sommes le LeBlanc-”y nosotros somos los LeBlanc” dije como si fuese obvio y me retiré.
Realmente me apenaba que estuviese sola, pero tenía mucho de lo que ocuparme, además de que ya estaba sintiendo frío así que quería cambiarme.
Una vez en mi habitación decidí bañarme, me dirigí a la ducha, pero vi que en mi baño no había jabón. Revoleé los ojos y me dirigí al baño “común”. Estaba ocupado.
-Quien quiera que esté ahí, ¿puede pasarme un jabón nuevo?- no quería esperar eternamente.
Abrieron la puerta. Ivo se apoyó en el marco de esta y sonrió con el cepillo de dientes dentro de su boca. Solo traía puesto un short.
-Pasha-hizo un ademán con su mano para que pasara. Le sonreí molesta.
Comencé a buscar jabón, él terminó de lavar sus dientes y se apoyó contra una pared. Se limitó a mirarme.-parece que tendrás que bañarte aquí- comentó al ver que no tenía éxito.
-No, no te preocupes, no invadiré tu espacio- le dije una vez que fui hacia la puerta-quizá tenga suerte en otro lado-expliqué.
-Sabes que por mi no hay problema- sonrió. ¿Por que siempre tenía que sonreirme? ugh.
-Te agradezco-traté de mantener mis pensamientos en orden y salí.
Fui directamente a Silvain y este me consiguió uno. Me bañé, arreglé y busqué a Ed en instagram, no tenía su número.
“Tengo tu saco, Je suis désolé”-le envié un mensaje.
“Hey, pensé que nunca lo mencionarías”-contestó a los minutos.
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Separados, pero juntos {Completa}
Teen FictionEsta es la historia de la familia LeBlanc. Mas precisamente de Camille LeBlanc. El poder de su apellido, la influencia de su padre, la fortuna familiar y el relacionarse con las familias mas ricas de Paris, podrán darle todo...menos una cosa. Despu...