Hemos llegado a casa.
Ni siquiera sé cómo sentirme ni cómo tratarlo después de que me contara tantas cosas. Todo lo que hemos pasado, es una locura. Lástima no poder tener imágenes en mi cabeza de todo eso. Quisiera al menos recordar lo bien que se sentía hacer el amor con él, sentirme orgullosa de mí misma por mis logros y saber perdonar a los demás. Como a Martha, en primer lugar.
Lía y Freddy parecen estar dormidos.
Sé que me está mirando pero no puedo siquiera verlo a los ojos luego de contarme cómo y por qué terminamos la última vez. Subo las escaleras hasta encerrarme en la habitación. Me quito la ropa, quedándome solo en bragas. Me recuesto en la cama mirando hacia el techo.
¿Qué demonios haré con mi vida?
Tenía que pasarme esto para darme cuenta de que sin importar cuantas vidas tenga, en todas me volvería a enamorar de él. Como describió nuestra intimidad, pareciera que era demasiado bueno para ser verdad. Puedo sentir sus manos y sus labios rozar cada centímetro de mi cuerpo y eso me vuelve loca. No puedo controlar mis hormonas. Siento que necesito algo para sentirme viva otra vez y me temo que es el único que puede ayudarme.
Me coloco una bata de tela fina, voy hasta su habitación, pero no está. Camino silenciosamente por toda la casa buscándolo, hasta encontrarlo sentado tomando lo que creo que es whisky en el balcón. Lleva la camisa desabotonada y el pelo algo despeinado.
¿Se ha puesto así por mi actitud luego de salir del restaurante?
— ¿Me das un trago? — me mira con sorpresa.
—No. El alcohol te hará daño. — está borracho. Su tono de voz no es así.
—A ti también. Mira cómo te pone. — le quito la botella.
— ¿Por qué vas en bata en la casa de alguien en quien no confías? — sabía que la cosa iba por ahí.
—Algo dentro de mí siempre confiará en ti.
— ¿Por eso estás aquí? — me mira de arriba abajo. Le doy un intenso trago a la botella.
¡Qué fuerte es esto!
—No sé cuándo voy a recordar el resto de nuestra historia, pero tengo muchas ganas de tener sexo contigo ahora. Mi cuerpo necesita algo que solo tú puedes darme y me siento vacía al no poder recordar ni siquiera qué se siente ser amada. — no puedo ocultarlo más.
—Pues no lo haré. Cuando vuelvas a tus cincos sentidos vas a odiarme y no lo soportaría. — intenta irse pero lo detengo.
— ¿Por qué crees que te odiaría?
—Porque creerías que me he aprovechado de ti. No estamos juntos desde...
—Desde hace un año, lo sé. — lo interrumpo. — Pero lo único que me importa en este momento es sentirme viva. Saciar todas estas ganas que tengo, así que mejor agradece que te lo esté pidiendo a ti. — no dejo de mirar sus labios.
— No tendré sexo contigo así. — sé que se está haciendo el más duro de la cuenta.
Lo veo a los ojos.
Me acerco más y coloco mi mano sobre el cierre de su pantalón.
—Yo sé que también me deseas, no te hagas el duro. — le susurro y lo empujo contra el sillón.
Me quito la bata hasta quedar en bragas frente a él.
— ¿Qué haces? Te podrían ver. — apenas recuerdo que estamos en el balcón.
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Powerful People ✔
RomanceLibro #3 de la Saga People 📚✅ La vida de Melanie Cross parece haber dado un giro enormemente drástico. Su fiesta de cumpleaños acabó en una tragedia dejando a tres personas muertas con el arma homicida en sus manos. Tras las autoridades encontrarl...