Rosas y Espinas |《Lookism》|

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— Deja de decirme nene, maldita loca.

— Nunca lo hare uvita, me caíste bien —Hayden dejo de lado la laptop estirando su entumecido cuerpo luego de una ronda a muerte en un videojuego— ¿Te debo cuatrocientos entonces?

— Si, así que paga —El chico con cabellos teñidos miro a la extranjera esperando paciente una respuesta.

— Te doy mí número, me envías tu cuenta y luego te deposito ¿Trato? —La pelirroja extendió su mano con la esperanza de que aceptará el trato.

El niño genio quedó pensante durante unos segundos aunque más temprano que tarde acepto.

— Bien Kouji, creo que Crystal ya se desocupo así que aprovecho y que me de un aventon hasta el hotel.

— ¿Que acabas de-. Ya que, ya se fue —En efecto, la chica había ya desaparecido de su campo de visión.

Un auto se encontraba afuera del edificio esperando a quien fue a acompañar en primer lugar. Arrimado al vehículo estaría el guardaespaldas de su nueva "amiga", de quién ya había superado el simpeo inicial.

— Hola mastodonte ¿Y el anillo pa' cuando? —Saludo a su particular manera, sin importar si le entendían o no.

Por el lado de Gun solo se limitó a soltar un suspiro agobiado, tan solo había pasado unas pocas hora y encontró alguien tan parecido a su compañero que estaba considerando que atraía a ese tipo personas— ¿Habrá un día que hables como una persona normal? —

— Yo soy normal —Responde risueña—, que tu seas aburrido ya no es culpa mía.

Ser llamada desde lejos por aquella chica con quién se supone debía mantener una amistad hizo que en su rostro se viera una muesca de disgusto y molesta, una que no paso desapercibida por quién usaba lentes de sol.

— Tienes ojeras ¿No has dormido acaso? —La conversación para este punto había avanzado bastante, ambas ya estando en el auto la pelirroja negó a lo preguntado —No deberías de desvelarte, eso es malo para tu salud.

— Lo dices por qué tu vives veinticuatro horas —Lo que dijo dejo confundida a la coreana debido a la diferencia idiomática— No es nada de importancia, solo soy yo hablando sola.

Hayden soltó un buen bostezó guardando su celular y se recostó en el regazo de la de menor estatura y llamando la atención de esta misma.

— Dormiré todo el camino si tanto te preocupa que no descanse bonita —La pelirroja guiño uno de sus ojos haciendo sonrojar a la contraría, luego solo los cerro para dormir por unos minutos en "tranquilidad".

Las horas poco a poco fueron pasando y cuando por fin llegaron al hotel en dónde estaría temporalmente hospedada Hayden, Crystal decidió que ya era hora de despertarla de su siesta.

— Hayden... —Comenzó a moverla para ver si reaccionaba, escuchando una que otra queja de esta— Hayden despierta.

— Mm~ ¿Qué~? —Aun adormilada poco a poco se fue sentando y de paso dándole un cabezazo con Crystal— ¡Ay, verga puta perra madre! ¡Ahg~~! —Una vez el dolor y el susto inicial se fueron pudo reaccionar mejor— Si antes no estaba despierta con eso seguro me desperté.

— Lo siento mucho —La voz de Choi sonaba completamente arrepentida y nerviosa—. No pude adivinar que te ibas a levantar de esa manera, lo lamentó.

— Cálmate un poco princess —Le interrumpió rápido para evitar seguir oyendo esas disculpas— No medí bien, así que no tienes nada de que disculparte. Aparte de que ya llegamos y no quiero hacerte perder el tiempo.

— ¡Oh!... De acuerdo —Crystal miro como se bajaba del coche sin tanto apuró— ¿Saldremos otro día?

La pregunta detuvo a Hayden un momento, una parte de ella le decía que era muy malísima idea aceptar… pero la otra no decía lo mismo.

— Claro —Le regalo una sonrisa— Tu solo me llamas y me dices dónde y cuándo. Ahora me tengo que ir.

— De acuerdo ¡Nos vemos!

«——————————»

— Oh no no no~ de todas la escuelas públicas que hay en Seúl tu padre eligió tremenda-.

— Tía por favor volvamos a lo que importa ¡Ay! —Llevo de inmediato sus manos a su cabeza por el dolor que le causaba su tía.

Recibió unos golpecitos en las manos con el peiné, ella estaba sentada frente a un espejo a merced de Dominic, su tía, de quién ya se estaba arrepintiendo de pedirle una ayudita con su muy rebelde cabello.

— Lo único bueno que veo en esa institución es que te inscribió en la carrera de moda —Después de aquel jalón que se notaba a leguas que fue muy intencional, siguió dándole el debido cuidado al cabello de su sobrina.

— Es un gasto menos, al ser una escuela de bajo nivel les importa una poronga que los estudiantes alteren prendas de su uniforme —Comenzó a explicar con detalle—, con eso no tendré que usar el uniforme del colegio ni la putifaldita que usan por defecto… o al menos no una putifalda de corte A

— Me parece que será el lugar indicado para ti, aún no puedes deshacerte de esas expresiones de barrio —Volvió a jalar un poco el cabello de su sobrina, aunque está vez sin querer—. Pero debo admitir que es una buena idea.

— Bueno… todo debe ir de viento en poa, así que mucha opción no tengo —Hayden comenzó a revisar su celular, tenía una foto abierta y la reciente notificación de su padre.

Saldremos, 9:15 PM.

Te tengo una sorpresa mí reina.