Rosas y Espinas |《Lookism》|

Special Delivery II

My Family

Un especial por los (aun incomprensibles para mí) 5K... Tachar esa cifra en el guión 6k.  Bueno casi casi que 7K, dejémoslo hasta ahí.

One-shot inspirado en la canción My family.

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Desde hace tiempo había Marcus decidido que el cumpleaños número 18 de su hija seria algo lo suficientemente privado, entre solo familiares por ende ella misma desistió en invitar a algún amigo cercano que pudiera tener al igual que tampoco había invitado a la hija de Charles, cosa que no le pareció extraño pues todo lo resolvió con que su hija dijera que fue una pelea. Pero si había algo que en ese instante causará que su furia se desatará era lo fácil que calló en guardar un puesto extra sin preguntar de quien se trataba, esperaba ver a cualquier otra persona menos a uno de los perros guardianes de Charles Choi. Y por lo que parecía no era el único montado en el tren de querer matar a aquel chico teñido de rubio.

—¿Por qué mí sobrina está tan pegada a ese rubio?— Allí estaba su propia hermana que tomaba con calma de su jugo y teniendo visto de reojo al chico.

—¿Por qué dejaste que ese tipo viniera?— Luego Demitri en su papel de hermanó mayor, no se le notaba pero temblaba como una bestia que no se podía lanzar a su presa.

—Mejor dicho ¿Por qué dejaste que se acercará a Cati?— Enrique, el hombre que cuidó de Hayden durante años también va colado en el tren.

—Voy a matar a ese tipo si le hace algo a mí hermana— Y por último Ricardo, el hermano menor de Hayden, hijo de la única pareja en aquella mesa y el cual a pesar de estar con la vista pegada a su celular vigilaba los movimientos que haría ese hombre con su media hermana.

La única que parecía no querer matar a Goo por estar allí era la madre de la pelirroja, la cual estaría con calma mirando a la dirección en donde estaba su hija —A mí no me parece de mal gusto. Pero si le toca un pelo lo mató a el y luego a ti perro mal parido— La mujer lo decía con tanta tranquilidad que llegaba a dar miedo, teniendo en cuenta lo venenoso que era su tono de voz.

—Me estoy arrepintiendo de haberlo contratado Carla—Un leve mueca de gracia apareció en su rostro, definitivamente había olvidado que aquella mujer con la que procreó podía llegar a ser así de venenosa y por lo mismo rogaba que Hayden no haya heredado tremenda habilidad.

Bueno, peor desgracia hubiese sido invitar a más familiares a el viaje, de haber sido el caso lo más seguro es que todo hubiera terminado e un linchamiento colectivo. Una masacre a un solo hombre en resumidas cuentas.

Por mientras ese par solo se estaba preocupando por pedir la comida y de paso pasar un rato alejados de la familia, aunque eso no evitaba que el rubio sintiera como lo estaban matando con la mirada -Me da la impresión de que todos en esa mesa me mataran al final del día- De vez en cuando miraba de reojo, debía admitir que en ese momento estaba teniendo por su vida.

-Y eso que no están ni mis primos, mis tíos o mis abuelos. Ya te hubieran caído a machete- Miro su celular y allí estaba la notificación de que uno de los pedidos estaba listo -Este es el de mi mamá y Enrique, anda que así tal vez te cogen cariño-

-Crees que es buena idea que les digas hoy sobre...-

-Es mi cumpleaños y no es un domingo siete, no se pueden enojar- Debido a la cara de confusión que puso solo le dio el celular y lo empujó levemente -Anda por la comida, luego te explico lo del domingo siete-

Un bufido salió de el en lo que revisaba el celular -No logró comprender cómo es que acepté y llegué a caer en esto-

-Eso es porque te pusiste loco por esta reina-

-Bueno, puedes que tengas algo de razón... Reina- Soltó una carcajada al ver cómo Hayden quedó fría un momento, era obvio que no se la esperaba -Voy a por la comida-

Y así Hayden vio como el que para esas alturas sería su novio se marchaba a uno de los locales del área de comida, ahora a ella le tocaba esperar a recibir lo que había pedido, cosa que por suerte sucedido rápido. Caminaba ya con las dos bandejas de vuelta a la mesa donde estaban todos reunidos cuando sintió como alguien le daría una nalgada con apretón y piropo incluido frente a su familia, los cuáles estaban a punto de saltar como una jauría de perros hambrientos y rabioso sobre quién le dio el golpe -Vamos bonita ¿te gustó? Por que no vienes y compartes ese plató extra conmigo- Un sucio borracho más metido en un centro comercial.

En realidad no decía nada por que estaba a punto de dejar caer lo plató y partirle el brazo, pero para suerte de la inocente comida Goo aparecería -Disculpame por dejarte sola mi reina- Este tenía esa sonrisa de maniático que a veces se cargaba, agarrando fuerte la mano con la que ese hombre había tocado a su novia -Me parece que ahora nadie respeta adecuadamente a una dama-

Y así se escuchó un grito de dolor en todo el lugar, efectivamente Goo no tardó en romperle la mano al hombre, ya luego se encargaría de sobornar a los de seguridad pues en ese momento solo tenia una cosa en mente y era comer junto a la familia de su chica.

Sin saber que con algo tan simple como aquella acción estaría empezando a ganarse un poco la confianza de los presentes en esa mesa -Lamentamos el alboroto señores- Enrique y Carla recibirían la comida con una sonrisa a pesar de no entender las palabras del rubio completamente.

-Hayden- La señora de cabellos rojos llamaría la atención de su primogénita la cual la miraría casi de inmediato -10 puntos mas-

Una risa se escaparía de los labios de la joven antes de que todos empezarán a comer a gusto, puede que Goo no entendiera mucho de lo que conversaban, mayormente cuando lo hacían en español. Pero tenía a su traductora personal.

Por otro lado los adultos estaban algo más calmados, después de todo...

Tener un loco más en la familia no se oía tan mal como pensaban.

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Un aviso final por parte de su servidor, la historia tendrá actualizaciones algo lentas.

Es que voy muy rápido y quiero darle chance al manhwa de avanzar mucho más de lo que ya está.