Capítulo 7: Amor.

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(Escena explicita +18)

Me subo al auto arrancando de vuelta a casa, no quiero ver a ningún Morgan, no ahora que me veo muy mal. Las arcadas vienen a mi cada dos segundos y los recuerdos de esa noche en Italia junto a Antoni me hacen detener el auto para vomitar.

El vómito no se detiene haciéndolo una y otra vez, tanto que hasta me duele la garganta, los ojos me lagrimean y el corazón me palpita con mucha intensidad.

El celular suena, agarro una botella de agua que tenía dentro del auto y me lavo la boca sacando el mal sabor del vomito. Entro otra vez al auto y olvido esos recuerdos que me ponen tan mal.

No puede ser, Antoni no puede ser mi medio hermano.

Siquiera le presto atención al celular que no para de sonar, sigo conduciendo hasta mi departamento, las calles están oscuras, hay autos pasando de un lado a otro, mi cabeza me duele y las luces de los carriles me marean.

El celular se conecta con mi auto y escucho «Daddy Reece, llamada entrante», ya que cuando llaman más de una vez, dentro de mi auto, lo toma como una emergencia y se conecta a él.

No quiero preocuparlo, así que es mejor contestarle, porque si no lo hago, Reece enojado es mucho peor que cualquier Morgan unido a la misma vez.

—¿Aló? ¿Daddy Reece? —Contesto como si nada estuviera pasando.

Se escucha un suspiro a través del teléfono, y lo identifico ya que hasta su respiración la conozco.

—Casi me vuelvo loco, Alex llegó alterado, te habías ido sin avisar a donde ibas, aparte no llegabas a la casa, ¿Dónde estás? —Habla en un tono autoritario que reconozco de inmediato.

El dolor del estómago no me deja responder, esas arcadas me están causando dolor. Gruño aguantando las arcadas que esta vez no sé por qué.

—Estoy manejando a mi casa, es que no quiero verle la cara a Alex Morgan. —Respondo agitada y jadeante.

El vómito casi sale de mi boca a no se gracias a que me lo trago haciéndome sacar un gemido de frustración.

—¿Con quién estas? —Pregunta, y me imagino que escucho mi gemido, ojalá y no piense otra cosa, porque Reece Morgan es un poco insoportable cuando está verdaderamente celoso— Micaela Blossom, ¿Dónde mierda estás?

El dolor en el estómago me hace detener el auto en una esquina, el celular se me cae al asiento de a lado, jadeo desesperada, ¿Qué me sucede? Me duele mucho.

Las arcadas vienen otra vez a mí y abro la puerta vomitando casi al instante, mi boca me duele al igual que mi garganta y la cabeza que no deja de palpitar. Me mareo, pero no dejo de vomitar, no se detiene.

Un auto alumbra mi vómito y me exalto al ver que he estado vomitando sangre todo este tiempo.

A lo lejos escucho la voz desesperada de Reece gritado una y otra vez mi nombre, mis ojos se nublan, mi respiración se vuelve lentamente dolorosa, mi estómago me arde al igual que mi boca, todo sucede tan rápido que no logro descifrar el momento en donde me desmayo viendo todo negro.

+++

La cabeza me palpita, las luces inundan mis corneas al abrirlas y ver el pasillo blanco de un hospital. Escucho una y otra vez desesperadas de unas enfermeras, mi respiración es muy lenta, mi estómago arde, pero las ganas de vomitar han cesado. Cierro los ojos descansando de las ganas de vomitar.

Una luz se atraviesa por mi ojo cuando una enfermera me lo abre, quito mi rostro y la escucho decir «Despertó, la paciente despertó» Me incorporo ojeando el lugar: estoy en un hospital, específicamente en una habitación. Mi mano tiene una aguja que se conecta con un cable; venoclisis.

Destrucción (Los Morgan) [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora