Capítulo 98

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– Oye Otomura ¿Por qué no intentamos hacer tu técnica combinada? – Propuso Diego al recordar como ese tiro no fue parado por nadie.

– Utilizar el Heptagram no es un juego compañero, no es por ser egoísta chicos, pero si se dieron cuenta que la mayoría de los que participaron para hacerla están en la banca es porque la carga que hace para el cuerpo es exageradamente mala – Trato del explicar el joven de lentes.

– Y si es tan pesada ¿Por qué tu no estas descansando con los demás? – Quien interrogaba ahora era Nozomi.

– Por qué no sobre pase mis limites, si se dieron cuenta, les vuelvo a decir lo mismo, quienes pasaron su límite están sentados en la banca, yo no lo voy a usar por hoy y punto – El niño de Oumihara se retiró por un momento sus goggles para limpiarse sus ojos los cuales empezaban a sangrar con levedad – ¡Mierda! – Susurro para sí mismo el defensa.

– Bien no la uses, pero encárgate de que tus estrategias nos ayuden en el marcador – Dicho reclamo llego por parte de Arata al pisar el balón y reanudar el encuentro.

El equipo A manejo la pelota unos cinco segundos en esta ocasión, puesto que los integrantes del equipo B no dejaron pasar ningún segundo para comenzar a moverse con total libertad en el campo.

– Recuperemos el balón – Alentaba con un poco más de cansancio la delantera morena de cabellos azules.

Handa por su parte sentía que sus piernas ya no le respondían del todo, desde el inicio del segundo tiempo se sintió un poco mareado, haciendo que sea no lo dejara concentrarse a pesar de intentarlo – ¿Por qué estoy temblando como si fuera el primer juego en el que participo? – Se pregunto el castaño al bajar a la defensa en lugar de Kogure quien subió a la media.

– ¡Saiji detenlos que no pasen! – Gritó desesperadamente Megane al ver cómo le aplicaron una elástica al mero estilo brasileño.

– ¡Masato que esperas anota otro gol! – Ordeno el delantero de fuego al ver como su primo retenía el esférico por mucho tiempo.

Aquel gol nunca llego puesto que una barrida por detrás hizo que el primo de Shuuya se fuera de espaldas, perdiendo el equilibrio y cayendo con todo su trasero al frio campo de juego.

– ¡Ah! – Un gritó de dolor se hizo presente por parte del delantero al estar en el suelo – ¿Por qué hiciste eso? – El reclamo no dejo pasar más tiempo para hacerse presente.

Kazemaru al estar cerca del área de la falta se levantó de su lugar y fue a ver si Masato se encontraba bien, de paso le daría una llamada de atención al responsable – ¡Saiji Kirigakure! Que te dije de estar jugando sucio a pesar de la desesperación – Aquellas palabras helaron al joven ninja quien se quería escapar del seguro regaño – Ven acá en este mismo instante – Pero no lo logro por la intensa presencia que reflejaba su amigo de cabellos azules.

– Me dijiste que no lo hiciera, porque no se debe y que debo de controlar mis emociones – Respondió el defensa de ojitos naranjas al jugar con su cabello como niño pequeño – No lo vuelvo hacer lo prometo – Dijo apenado el peli rosa al ver directamente a los ojos al exatleta.

Ichirota bajo su mirada un poco y levemente hazlo su fleco para ver mejor al peli rosa – Ve y discúlpate en este mismo momento con Masato, luego nosotros hablaremos de tu comportamiento – Sin más el exatleta ayudo al mencionado a levantarse y hacer un pequeño estiramiento para reintegrarse al partido.

El señor Furukabu comentó la peligrosa jugada con los demás adultos quienes votaron por sacar una tarjeta amarilla al responsable – Saiji tienes suerte de que esta tarjeta solo sea amarilla – Dictó el adulto al mostrar el cartón y hacer que el menor se disculpara por su mal comportamiento – Es tiro libre directo a favor del equipo B –

INAZUMA ELEVEN SUB-CONSCIENTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora