INAZUMA ELEVEN SUB-CONSCIENTE

Capítulo 107

En Japón el sol estaba saliendo puesto que eran aproximadamente las 7 de la mañana y los niños que por el momento dormían pacíficamente no daban señales de despertar más que nada por flojera que otra cosa o mal.

Como hoy era miércoles se suponía que el clima estaría agradable, pero por razones desconocidas no era así, una gran tormenta azotaba la ciudad Inazuma. No parecía tener fin al contrario parecía que iba a durar días o incluso semanas. Los únicos cinco despiertos en la base debajo de Raimon eran los tres androides y los dos candados, dichos personajes se encontraban en la habitación con la puerta color morado, para ser más específicos la sala de comunicación directa con los candados, tenían una pequeña junta para decidir los cambios a los planes de hoy. Cabe mencionar que no todos los candados estaban presentes, si no, los que tendrían "mayor" relevancia para el avance de esta línea.

Cada uno tenía su cámara encendida y sus típicas capuchas puestas, pues al ser una reunión "Oficial" seguirían sus protocolos por mero gusto, además de estar en completa privacidad, nadie que no estuviera autorizado para entrar a la reunión lo lograba hacer.

– Abuelito Mori veo que su regreso a Yokato tendrá que esperar hasta mañana por que con esta tormenta no les recomiendo marcharse – Quien hablaba en esos momentos era el segundo capitán de los relámpagos oscuros al estar revisando el clima en su tan característica minicomputadora dorada.

– Recomiendo que sigas las palabras de mi nieto, no deseo que alguno de tus alumnos o incluso tú sufra algo que podemos evitar – Daisuke mostraba el apoyo hacia su nieto a su vez que preocupación para su viejo amigo.

– No me sorprende que se preocupen por mí y algunos de los futuros conejillos de indias, así que les tomare la palabra nos marcharemos mañana o cuando la tormenta aminore – Contestó el director de Yokato con toda la calma del mundo.

– Hablando de conejillos de indias – Hiroto miró detenidamente la pantalla de su hermana, puesto que la entrenadora se encontraba en la habitación de su hija completamente sola y únicamente con el retoño del mal a petición especial – ¡¿Cómo está mi sobrina?! – La voz robotizada del peli rojo se logró percibir molesta.

– Rose se encuentra bien, de hecho, tan bien que no ha querido comer nada desde que despertó desesperada en la madrugada, me causo bastantes problemas y ¿Qué crees hermanito? Volvió a intentar saltar por la ventana – Habló la mujer de cabellera negra al tomar la cámara de su dispositivo del mal, para mostrarle a sus compañeros que la niña estaba despierta y tenía cara de pocos amigos, seguía conectada al suero, agregándole que uno de sus pies estaba atado a la cama para que no intentara escapar otra vez.

– Déjame en paz bruja – Fue lo único que dijo la niña de cabello gris al tener su verdad activa, y enrollándose con la cobija de la cama – Deja de grabar a tu puto experimento – Por decima vez en el día la menor solo hablaba en español, acto seguido la C6 volvió a dejar el aparato en su lugar y por un momento fingió salir de la habitación para ver como intentaba escapar su creación otra vez.

Hanako al creer que estaba sola se destapo, tenía su pijama puesta todavía y de un tiro se arrancó el suero ahogando un grito de dolor por las agujas junto con la cinta que tenía puesto – ¡CARAJO! Si no me deja ni un puto momento en paz como voy a tener algo de calma – Gracias a que su rosa se estaba moviendo rompió el amarre de su pierna y solo miro a los presentes en la cámara que la habían visto desde que su madre la mostro – Hola vejete, tío, amigos, superiores y maestro – Saludo como sin nada e iba a fastidiarle el equipo a su madre, pero la mirada de su progenitora lo impidió – Atrás bruja que si no me tiro por la ventana – Amenazo la niña, pero solo recibió un madrazo de un caramelo macizo en la cara – ¡Me dolió! – Chillo la menor de los Kira y vio el dulce con ojitos brillantes.