magic and green eyes ❁ muke

❁Promesas.

Algo no se sintió bien cuando despertó aquella madrugada, seguía envuelto en la calidez de los brazos de Michael, pero la tormenta afuera le advertía que ya no podían seguir esperando más. Entrenó duro durante esos días, llegaba agotado al castillo, pero Michael lo estaba esperando con un baño caliente, té dulce y comida.

Ben le preguntó un día que por qué se desaparecía todas las tardes, Luke enfureció y le dijo que por fin se había acordado de que tenía un hermano a parte de Jack, quien había estado escuchando todo. Luke no hablaba mucho con él, no hay un lazo de hermanos entre ellos y por eso no le pidió ayuda con el contrato de compromiso con Sahira, además, dudaba que lo fuese a ayudar. Siempre había estado complaciendo a sus padres, Jack era su más grande orgullo, sabía muy bien eso.

No pensó en avisarles que se marcharía del castillo con un ejército de brujos y brujas esperándolo para pelear contra una fuerza oscura que retiene a la isla de la Luna.

Sahira rogaba por atención cada vez que lo encontraba en el castillo, Luke seguía resistiéndose a su compañía. Aunque tuvo que mostrarse un poco más atento para no levantar sospechas de su huida. Una guerra entre Insoun y Kristain era por lo que menos debían preocuparse cuando la magia estaba atacando a sus islas y no podían pelear de vuelta. Y Luke sabe que todos están preocupados por eso, Michael se lo ha dicho, en las reuniones que tienen después del desayuno, nadie sabe como combatir la desgracia que cayó sobre sus tierras. Amaranta participó en una de las reuniones, Jack y el rey Andrew decidieron no ir a Inmon, pero si aportar con soldados, armas y embarcaciones. Ella no mencionó que llevaría a Luke.

—¿Por qué estás despierto tan temprano?

—¿Cómo sabes que estoy despierto?

—Estás pellizcando mi mano.

Luke detuvo sus dedos bajo las mantas, si estaba pellizcando la mano de Michael que descansaba sobre su abdomen. Suspiró dándose la vuelta, seguía con sus ojos cerrados, aunque lo apretó más contra su cuerpo. Ya no volvería a dormir.

—Estoy preocupado.

Un trueno resonó afuera, más fuerte que los demás y la lluvia se intensificó.

—Nos iremos mañana —continuó.

—Pasaré por ti hoy después de cenar —el príncipe de Senle-int abrió los ojos. Luke lo miró sin entender—. Así que evita a Sahira.

—Eso he estado intentando desde que llegó —murmuró algo fastidiado. La mención de su nombre y el recuerdo de si existencia lo ponían de mal humor.

Michael lo acercó más (si era posible) y hundió su rostro en la curva de su cuello. Luke se relajó contra su cuerpo.

—¿Te ha besado otra vez? —preguntó con la voz amortiguada. Sonrió barriendo sus manos por la espalda del príncipe.

—Si.

Sintió sus manos cálidas metiéndose dentro de su camiseta, luego sus labios raspando la piel de su clavícula, finalmente sus dientes. Y se dio cuenta de lo que estaba haciendo mientras se quitaban la ropa y enredadaban bajo las sábanas cuando los truenos se volvían cada vez más fuertes. Michael intentaba distraerlo de lo que sea que estuviera pasando afuera.

❁ ❁ ❁

Había alguien que sabía lo que estaba pasado, la única tranquilidad que tenía era saber que Luke estaba bien, pero pronto tendría que exponerlo a un peligro que jamás imaginó. Era su pequeño, quería protegerlo a pesar de todo, pero la magia tenía otros planes.

El barco llegó con unos cuantos sobrevivientes, entre ellos Celine y Jasmine, quienes se rehusaban a hablar con ella. Sólo hablarían con Nathaniel, entonces Amaranta conectó los hilos y lo supo. Escabullirse por los pasillos no era su cosa favorita, mucho menos estaba orgullosa de aquella habilidad, pero la vida de Luke estaba en riesgo, así que lo hizo, siguió a las jóvenes hasta el dormitorio de Nathaniel.