El Diario De Una Lectora ✓ [Completa]

2.

Las clases transcurrieron de una manera normal, y gracias al altísimo a aquellos chicos no se les ocurrió lanzarme otro pedazo de borrador.

Hace poco había sonado el timbre que anunciaba la hora del receso. Si, la hora que todos esperan durante todo el día, la hora en la que puedes hablar sin que el profesor te diga amablemente que te calles. Todos esperan con ansias está hora, pero yo preferiría estar allí sentada viendo al profesor hablar de lo que sea que debe enseñarnos... odio esta hora porque es la hora que me recuerda que estoy sola.

Todos comenzaron a tomar sus cosas para salir corriendo del salón, yo a diferencia de ellos iba más lento.

Pues, claro, no vas a salir corriendo a ver a los amigos que no tienes.

A veces me pregunto hasta qué punto me quiere mi conciencia.

Tome mi bolso y salí del aula. Decidí dar un recorrido por todo el colegio –Ya lo conocía, pero no tenía nada mejor que hacer–

Cuando ya había dado unas dos vueltas me detuve junto a una puerta que no había detallado, al abrirla me encontré con una biblioteca.

Vale, al menos no la pasarás tan mal estos... no sé ¿6 meses?

Decidí entrar. Todo el lugar estaba vacío a excepción de la bibliotecaria y una chica a lo lejos.

Pase por cada estantería detallando cada libro. La mayoría eran escolares, pero había una que otra obra popular. Y por obra popular hablo de Romeo y Julieta. Si, bastante original.

–Romeo y Julieta –dijo una voz femenina detrás de mí cuando tome el libro, me asusto, pero intente hacerlo lo menos notorio posible –Y yo pensé que era la única que amaba los clásicos.

Decidí voltearme y al hacerlo me encontré con aquella chica de la clase. Aquella chica morena que se sentó al otro extremo alejada de todos, la que estaba escribiendo algo en su libreta...

–¿Eres nueva no? estamos en la misma clase, un gusto mi nombre es Ámbar –Me ofreció su mano.

Ahora de cerca podía ver bien el color de sus ojos. Eran grises, de un gris bastante claro.

–Sí, soy Allison –dije tras quedarme pasmada unos segundos.

Alguien me había hablado...

¡Alguien me había hablado! eso es un milagro nacional, mi gente.

¿Ahora que se supone que se hace?

–Pensé que ninguno de ustedes sabía de cultura ¿qué haces aquí? ¿No deberías estar con Andrea o algo así?

–¿Quién es Andrea? –pregunte, confundida.

Ella pareció aún más confundida que yo.

–Andrea, Andy o como la quieras llamar –hizo una pausa para ver si ya sabía de quien hablaba, pero al darse cuenta de que no, siguió hablando –La chica de la que más se habla en todo el colegio, se moriría solo de que alguien en este pueblo no la conozca -Hablo como si fuera lo más normal –¿Por qué estás aquí y no con ella?

–¿Tendría que estar con ella?

–Vale, esto es raro... no eres de aquí ¿cierto?

–Me mudé ayer.

–Eso tiene sentido.

Hubieron unos segundos de silencio que decidí romper yo.

–¿Por qué tendría que estar con ella?

–Digamos que tiene una habilidad para absorber a las personas.

Eso parecía de película.

–¿Eh?