⌗𝐍𝐨𝐛𝐨𝐝𝐲 𝐋𝐢𝐤𝐞 𝐘𝐨𝐮

Capítulo 35

Ryujin's POV

Caminé por el pasillo de la preparatoria mirando alrededor, si encontraba a Yeji tenía que dar la vuelta o correr para que no me alcanzará. Volteé hacia el frente cuando unas manos tomaron mis hombros y me estamparon contra los casilleros de un golpe seco.

—Joder, ¿qué mierda sucede contigo Yeji?—pregunté quejándome del dolor que sentía en mi espalda, supe de inmediato

—¿Qué sucede conmigo? Eso debería de preguntarte yo a ti, una puta semana y media ha pasado desde esa noche y aun no hemos hablado—solté un suspiro sintiendo su cercanía.

—Ok, hablemos—dije abriendo mis ojos para mirarla—. Pero aquí no, vayamos a un salón, ¿me dejas pasar?—alcé una ceja al ver que no tenía la intención de moverse.

—Iré detrás de ti para tomarte de la sudadera, no pienso dejar que te escapes de nuevo—susurró rozando nuestros labios.

—Como quieras—se hizo a un lado tomándome del inicio de la sudadera que llevaba ese día, comencé a caminar con ella siguiendo mis pasos hasta encontrar algún salón vacío. Abrí la puerta entrando en el y fue del modo que me soltó, cerró la puerta para que tuviéramos privacidad—. ¿De qué quieres hablar?—pregunté alzando mis brazos.

—Tal vez de como perdimos nuestra virginidad en tu habitación, de como tu mamá me corrió después de descubrirnos o tal vez de porqué mierda me estas evitando—dijo enojada, mirándome seriamente—. Pensé que estábamos bien.

—¿Crees que así son las cosas? ¿Tan fáciles?—ella tomó una larga respiración al escucharme.

—Ya le pedí disculpas a Lia, ¿qué otra mierda quieres que haga?—gritó habiendo eco en el salón vacío—. ¿Qué otra cosa puedo hacer para ganarme tu perdón? Debo ponerme de rodillas frente a todos para pedirle una disculpa a Lia.

—Ya hiciste suficiente—se acercó a paso rápido hacia mi.

—¿Entonces por qué no me has perdonado?—tomó mis manos en las suyas, mirándome con una tristeza en sus ojos.

—Ya te perdoné, Yeji—ella sonrió al escucharme—. Solo necesitaba algo de tiempo para asimilar todo lo que ha pasado.

—¿Lo que ha pasado?—asentí cuando preguntó—. ¿Hablas de lo bien que te hice sentir?—me sonroje recordando lo que había pasado en mi habitación, ella sonrió al ver mi rostro rojo para después pegar sus labios a los míos, inicio un beso lento que fue subiendo de tono mientras me hacía caminar hacia atrás, me tomó de los muslos para cargarme y hacerme sentar en el escritorio, sus manos acariciaron mis piernas y sus dedos subiendo peligrosamente hacia mi adentrarse en mis bragas.

—Así las quería agarrar, puercas—empujé a Yeji lejos de mi cuando Minju abrió de golpe la puerta—. Al menos tenga la decencia de cerrar la puerta—nos miró seriamente para después comenzar a reírse.