5.- Cafetería

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Ralsei intentaba mantenerse lo más tranquilo que podía, aunque en verdad estaba nervioso por ser visto en un lugar donde hubiese demasiadas personas. Claro que no había nada que temer, es decir, nadie podría saber que él era un tipo diferente de monstruo con sólo mirarlo pero... seguía existiendo algo que lo inquietaba ante la idea.

El príncipe de la oscuridad recién se había cambiado de ropa a una más casual, aunque bastante similar a su vestimenta habitual. Intentando darse confianza a sí mismo, avanzó a pasos decididos hasta salir del Dark World, cubriendo al instante sus ojos con unos lentes muy oscuros. Atardecía, pero todavía no se acostumbraba a tanta luz.


¡Ralsei, justo a tiempo! — Le saludó Susie cálidamente, despeinando su cabello de forma dolorosamente afectuosa. — Te ves... ¡Te ves como un nerd!

Es decir, ¿Lindo? — Presionó Ralsei, riendo un poco. Susie tan sólo sonrió burlonamente. — ¡Hey, me harás sonrojar! — Comentó, a pesar de tener ya un tenue carmín en las mejillas.


Kris también estaba entre ellos, tan distante y callado como de costumbre, Ralsei lo saludó con rapidez debido a los nervios que le provocaba recordar el beso indirecto que habían tenido días atrás. El humano no respondió, pero volteo a verlo en silencio durante unos segundos antes de seguir con lo suyo.

A diferencia de ellos, Kris vestía su ropa usual.


¿Y dónde está Noelle? — Preguntó Ralsei, mirando a través del pasillo.

Me llamó hace unos momentos, dijo que estaba por llegar. — Susie cruzó los brazos detrás de la cabeza, bostezando ampliamente. — En verdad esa chica sabe de matemáticas, yo tuve pesadillas con números durante toda la semana.

El grupo empezó a caminar hacia la puerta.

¡Oh! Ya la recuerdo, ¿Ella te ayudó a estudiar? — La mayor asintió, algo desinteresada. — Tienes mucha suerte de tener a Noelle como amiga. Yo te ayudaría pero... no estudio con ustedes.

Descuida, Ral. Contando a Berdly, tengo suficientes nerds detrás ahora mismo.


El más bajo sonrió ante su comentario, sincero y rudo como sólo ella podía serlo. Finalmente salieron y se encontraron con Noelle, quien agitaba su teléfono para obtener señal, más al verles recuperó la compostura y saludó.

Noelle llevaba puesto un vestido de tirantes celeste con una blusa blanca de mangas largas debajo, Ralsei no pudo evitar pensar que se veía realmente adorable con aquellas prendas, así que sonrió ampliamente.


¡Hola, Noelle! ¡Te ves muy linda con tu vestido!

Gracias, Ralsei. — Asintió la cierva, volteando la mirada hacia Susie, quien veía la hora en su reloj. — Oye, Susie, ¿Crees que yo...?

Eh, hablemos en el camino. — La interrumpió, tomando la delantera.


Ralsei ya estaba acostumbrado a ser alguien perceptivo para poder entender a Kris, por lo cual se le hizo fácil notar la decepción en la mirada de Noelle ante el poco interés que Susie había tenido en ella.

"Ella esperaba un cumplido de Susie" razonó el príncipe, sintiéndose mal por la contraria.

Al contrario de lo que esperaba, Noelle recuperó los ánimos rápidamente y alcanzó a Susie con pasos decididos, tomando su brazo con timidez antes de empezar a conversar sobre qué pedirían al llegar a la cafetería. Ralsei no quiso interrumpirlas, así que se quedó detrás junto a Kris.

Un Príncipe Encantador ¦ #FlufftoberDonde viven las historias. Descúbrelo ahora