¿Porqué no?

~18~

Aoko invitó a pasar a su amiga, ambas se contaron su día y también sobre el tema actual.

ㅡ¿Sabe lo que ocurre?

ㅡMás bien Jii-san se lo contó, supongo que no pudo evitarse. Creo que fue lo mejor decírselo

ㅡEspero que no traiga consecuencias el contarle todo, el mismo doctor dijo que debía tomárselo con calma. Si quieres puedo hacer que olvide la mayor parte

ㅡ¡Oh no! No será necesario Akako, claramente fue un gran peso. Pero lo tomo mejor de lo esperado, ella es fuerte

ㅡTe aconsejo que vayan lento, a pesar de que sabe lo que pasa ahora, no quiere decir que sepa qué hacer

ㅡTienes razón, todavía hay muchas cosas que no recuerda. O que olvido

ㅡ... En ese caso ¿puedo ir a verlo?

ㅡClaro, aunque sigue dormido

ㅡAprovechare de examinarlo, si no fuera por mi ya estaría con mis antepasados

ㅡJaja, gracias. Eres la mejor

ㅡPor supuesto que lo se, no es necesario decirlo ㅡsu silueta desapareció al subir las escaleras.

Tenía pensado en volver a su hogar para estar junto a la adulta que se quedaba temporalmente lejos de Kaito, aun no estaba lista para enfrentarlo, parece ser. El timbre la encaminó a la entrada y abrió la puerta, encontrando a una chica de su edad con un niño.

—Disculpa ¿Aquí vive Kuroba Chikage?

Quedó sorprendida ante ellos, una copia de Kaito en su infancia y su reflejo frente a ella, ambas estaban igual y el menor tuvo que llamar la atención.

—¿Ran-neechan tiene una gemela?

—Ah, yo... estoy bastante segura que soy hija única

—Veo que eres Mouri Ran, Kaito me contó de ti y el parecido que tenemos. Aunque verlo es diferente a saberlo, y ella sí vive aquí pero no está

—Entiendo, siento mo-

—¿Esta Kaito-niichan?

—Si, está arriba en su habitación —respondió extrañada.

—Quiero hablar con él ¿puedo?

—Seguramente estará dormido, no creo que pueda...

—Esta más que despierto, los recibirá con gusto. Especialmente al pequeño

La bruja no despego sus ojos de Edogawa desde que bajo las escaleras, lo sintió con solo estar afuera de la propiedad y le intereso más la razón del porque estaba justo ahí. Por otra parte le inquieto el que dijera que lo recibiría con gusto, aunque tampoco era improbable si se trata de Kid.

—Akako-chan ¿ya esta levantado? ¿Qué tal sus heridas?

—Estará bien en unos días, pero dile que no compartiré mis notas de la universidad cada vez que pase. Hoy es la excepción

—Me encargaré de eso, también gracias por venir ayer de improvisto

—Tomare mi compensación mañana, deja de preocuparte tanto por el y mantén tus estudios —le acarició la cabeza con cariño.

—Jeje

—Nada de jeje, te vigilaré. Adiós Aoko

Paso a un lado de los otros y miró de reojo al menor antes de volver a concentrarse en el camino a su hogar.

—¿Ella sabe medicina? —pregunto con algo de nervios por su mirada.

—¿Eh? Oh, algo así podría decirse. Es que mi amigo es muy despistado y se lastima fácilmente