Tentaciones: Regresando al pasado. ©

♛CAPÍTULO 15♕

♛✧Yo haría lo mismo por ti,
tonta✧♛

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Adrean Jones

Despertar y ver a Lia a mi lado fue lo mejor que me pudo pasar, pero recordar a los hombre que allanaron mi casa solo para buscarla a ella, no me dejaba estar tranquilo en ningún momento, es que si algo le llegara a pasar por mi culpa no me lo perdonaría jamás, ahora ya estoy mucho más tranquilo. Ya pasó una semana y no hemos tenidos señales de vida de los posibles culpables.

No sé si será bueno o malo, pero para mí es mejor que ni vuelvan.

Y bueno, la policía tampoco es que haya podido encontrar nada, gracias a que no dije lo que en realidad paso esa noche, ¡pero vamos! Tampoco es que le iba a decir: No señores oficiales, es que unos imbéciles entraron a mi casa porque estaban buscando a mi mejor amiga para quien sabe qué.

Eso le podría traer conflictos a Lia y su estancia en Colombia duraría más y eso es lo que menos quiero. Mientras más rápido salgamos de aquí es mejor y ya hoy por fin me dan el alta.

Para despedirme de mis padres tuve que hacerlo por llamada, no quería exponerlos más de lo que ya están. Cuando les dije que me iba con Lia para Italia no les cayó para nada en gracia la noticia, mi madre no paraba de sermonearme y decir que si me había vuelto completamente loco, que casi me matan por andar buscándola y aun así me iba con ella y no paraba de decir lo mismo una y otra vez, que lo mejor era que me alejara de ella, que con quien sabe dios estaba metida para que la anden buscando personas de ese tipo.

Mientras, mi padre se mantenía al margen de la situación he intervenía cuando mi madre se sobre exaltaba, mi padre y yo le dábamos a entender que todo tenía una explicación, ella seguía de terca diciendo que lo mejor era que yo me alejara, pero mi decisión era la misma y no iba a dar mi brazo a torcer. Ella no lograría que la dejara sola en estos momentos cuando más me necesita, después de una larga discusión al final termine convenciéndola.

Lia no tenía nada que ver con los tipos que la estaban buscando, no estaba del todo muy convencida pero al menos se le quitó de la cabeza que Lia era una mala persona y quería llevar a su bebe por el mal camino. 

Salgo de mis pensamientos al escuchar la puerta abrirse, me giro para encontrar a Lia adentrándose a la habitación.

Mierda.

Trae un short color vino, que me deja ver sus hermosas piernas, una blusa blanca que permite ver sus curvas no tan exageradas, acompañada de una chaqueta negra y unas botas de ese mismo color que le da ese aire de chica mala y lo que no puede faltar, sus lente que la hacen ver tierna. Esta jodidamente sexy, no puedo dejar de mirarla como idiota. 

Vamos hermano es tu mejor amiga a la que estás viendo ni un puto depravado —me acusa mi subconsciente.

—Adrean, mis ojos están aquí —señala su rostro—, no más a bajo —trago duro.

—Aquí esta, cámbiate que nos vamos —me pasa una bolsa que tiene ropa mía, para luego sentarse  a un lado de la camilla.

Me levanto para poder salir de la bata azul y comenzar a cambiarme, cuando ya estoy casi listo y solo me falta la playera me detengo para mirarla detalladamente.

Sigue igual de hermosa como siempre, pero con la diferencia que ahora su piel es más clara que antes, me imagino que eso se debe a que casi no sale a la luz del sol y puedo notar también que debajo de sus ojos ya no están esas bolsas negras, a causa del no dormir, sin duda Italia le devolvió un poco la vida.