EXTRA DE LAS LOCURAS EN MADRID
Narrador Omnisciente.
Hady Hammes era la definición de rebeldía, ella bien podría decirte que no hará algo malo más eso no es cierto, de alguna u otra forma lo terminara haciendo, porque ella ama hacer maldades y travesuras que rompan las reglas. Le importa una mierda los putos deseos de los demás. Ella tenía el don de adaptarse a lo que sea. Inteligente, amable pero con la mente de una retorcida.
Luchaba como una fiera, pocas veces los que la han enfrentado en alguna pelea salían ilesos, o más bien, con pocos huesos rotos. La mayoría perdía la vida.
Ella además de sádica era una genio. Su padre lo sabía y la entrenó para que fuera una de las mejores. No tenía una especialidad en especifico, no, más bien podría con todas las ramas de la medicina. También la química.
Ella y las chicas estaban en Madrid, dónde su padre le había dejado un laboratorio que prontamente tenía que trasladar en Italia junto a la que ya tenía, se le ocurrió pausar el trabajo y el plan de venganza para irse de fiesta y divertirse, obviamente, obligó a sus socias a acompañarla.
—Yo paso —dijo Hellena, estaba cansada por el viaje y atender el Club desde la distancia le estaba pasando factura.
—Yo si quiero mover las caderas un rato —intervino Samantha—, quiero olvidar los jodidos problemas y no me viene mal esta salida.
—Dos votos a favor —canturreó la ojiazul—. Esta noche nos echaremos unos tragos y pobre del que se niegue.
—¿Que pasa con nuestros votos? —se quejó Sebastián, el amigo de Samantha —, ¿qué no consideran nuestra opinión?
—Resignate hermano, ya sabemos que dónde va una, van todas, y donde van todas nosotros pues ni modo —acotó Adrean.
Hady se había comprado un auto deportivo, lo cuál se la llevaría consigo en el avión de Samantha cuando tuvieran que regresar a Italia.
Las tres se subieron en el deportivo negro, los demas se subieron a sus respectivos vehículos alquilados para seguir a las mujeres.
—Bueno, hay te vamos san pedro... —vocifero Hady arrancando su nuevo juguete y dejando un rugido al comenzar a tomar velocidad.
Samantha estaba que se moría de la risa y Hellena solo podía atender a las miles de reglas que Hady estaba rompiendo al conducir de una forma tan alocada.
Llegaron a un club dónde comenzaron los tragos y la diversión desenfrenada.
Bailaron como nunca antes, Hady de agarró a las caderas de Hellena y comenzó a bailarle, Samantha se le unió y la morena estaba que se moría de la vergüenza al ver que sus dos compañeras eran unas locas dementes.
—¡Sueltate y déjate llevar! —la ánimo Hady.
—¡Mueve esas caderas! —Sam le hizo una pequeña demostración y poco a poco Hella se fue soltando.
—¡Tres tentaciones! —gritaron las tres a coro y lo que hizo Lía dejó a más de uno con la boca abierta. Adrean entreabrió la boca sorprendido cuando vio a su mejor amiga quitarse la blusa y quedarse en sostén mientras comenzaba a bailar con Samantha y Hady de una forma algo erótica.
—¿Esa es mi Lia?
—Si, hermano, ya la perdiste, esas dos la han corrompido —habló resignado Sebastián, el cuál conocía a Samantha y sabía que cuándo se divertía lo hacía al máximo. Hady estaba tomando desde la botella, no paraba de reir y las chicas estaban igual o peor.
Dieron las cinco de la mañana y el club ya tenía que cerrar.
Salieron tambaleandose, a duras penas y podian mantenerse despiertas pero eso no fué impedimento para que Hady nuevamente quisiera conducír.
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Tentaciones: Regresando al pasado. ©
ActionEsto trata de una historia dónde los personajes deberán volver al principio, recordar lo que fueron, como fueron y lo que serán. Tendrán que superar obstáculos peligrosos, luchar contra quienes intentan someterlas, por que sí, se trata de mujeres qu...