Nuevamente Juntas

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Me sentía cansada, era la tercera vez que tenía que ir por algo al supermercado, siempre olvidaba algo, realmente se estába volviendo muy tedioso, pero bueno, era mejor estar así, a no estarlo, ella al fin se quedara lejos de mi, o eso creía , porque justo cuando estaba por comenzar a comer, pues... me entró una llamada.

Tick, tick, tick.

-ah, genial! Nunca dejan comer a uno en paz! ¡¿Diga?!

-oh, hola Eli, disculpa por molestarte en este momento, jeje. Soy Karin, ¿me recuerdas?

-ah, si te recuerdo, ¿que pasa?

-bueno... Lo que pasa es que... ¡¿Podrías cuidar de Ana?!

-¿que? ¿Cuidar de quien?

-de Ana, realmente lo siento por molestarte y pedirte algo como esto, se que fui yo quien te pidió que la llevaras a vivír conmigo, pero... Ya llevo semanas fuera, y eh estado buscando un lugar donde ella pueda vivir y no he encontrado ninguno que considere adecuado, así que... ¡Puedes quedarte con ella en mi apartamento!

-¿que? ¿Quedarme yo con ella? ¿Porque? ¿Sabes? Yo tengo muchas cosas que hacer y la verdad es que...

-¡no pagaras nada! ¡Yo pagaré los meses que estés ahí! ¿Si...?

-Ah... Bueno... Déjame pensarlo, ¿si?

-esta bien. -deje el celular en la mesa y me aleje.

-¿que hago? Bueno, no quiero estar cerca de ella, pero el estar en un apartamento donde no tengo que pagar, pues... Se escucha tentador, bueno... Solo tendré que gastar en comida, pero es lo de menos, así que... -volví a la mesa y tome mi celular. -¡si! ¡Aceptó! ¡Encantada aceptó!

-¡si...! ¡Gracias Eli! ¡Te debo una!

-si... Y una muy grande, jeje.

-claro, adiós.

-adiós. -ella colgó.

Después de terminar la llamada, empecé a arreglarme, no me agradaba para nada la idea de estar junto a ella, pero... El como dije antes, estar en un lugar donde no tendré que pagar por estar ahí. Bueno... No suena tan mal, jeje.

Termine de ducharme, sali, empecé a vestirme, estaba un poco feliz por vivir en ese lugar, sin tener que pagar nada, lo único malo por así decirlo, era tenerla cerca, realmente solo podía pensar en eso en este momento.

Salí rápidamente, sin ningún problema o retraso, sentía emoción, no sabía porqué, pero suponía que era por eso que no tenía nada más que hacer, solo debía vigilar a esa tonta y tendría todo gratis, pero bueno, eso creo, jeje.

Al fin había llegado, toque el timbre y...

-ahora abro! ¿Cuanto es...? ¿Eli?

-Ah, hola.

-Hola, ¿que haces aquí?

-bueno, fui enviada aqui, porque tal parece, estas sola y no confían en el que estés sola, sea bueno, además, tendré todo gratis. ¿Puedo pasar ya?

-¿Eh? Ah, si, si, pasa, yo...

-no digas nada, a mi tampoco me gusta mucho estar aquí, pero no iba a rechazar esa oportunidad, ¿donde dormiré?

-¿Eh?

-si que eres tonta, te pregunto, ¿donde dormiré?

-Ah, bueno... Ven, -me llevo al segundo piso. -bueno... Esta es tu habitación.

¿Porque Solo Contigo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora