𝙷𝚞𝚗𝚝𝚛𝚎𝚜𝚜 | 𝙺𝚘𝚕 𝙼𝚒𝚔𝚊𝚎𝚕𝚜𝚘𝚗

Capítulo quince

VIRGINIA, MYSTIC FALLS [HACE UN AÑO]

Era el día del baile de los fundadores, Thea fue sola ya que su cita le canceló a último momento. También robo el reloj Gilbert para dárselo a Jeremy, se ganó una sesión de insultos de parte de Elena, pero valió la pena al ver la mínima felicidad en los ojos de su hermano menor.

Ahora mismo estaba con Caroline en uno de los baños de la gran mansión.

—Es mi culpa, yo sembré la duda —la verdad Caroline no sonaba nada afectada por hacerle saber a Elena sobre Katherine, la ex de Stefan.

—No lo es, Stefan oculta muchas cosas —la castaña trató de mejorar la situación.

—Aún así, no debí contarlo.

Vio una pequeña marca debajo del pequeño suéter que la rubia tenía puesto, hizo aun lado la prenda y se alarmó al ver marcas de mordidas.

—Caroline ¿Qué es esto? —le cuestionó.

—N-nada, n-no es nada —tartamudeó, denotando su nerviosismo.

De repente, algo hizo click en su cabeza —¡¿Damon te hizo esto?! —interrogó alarmada.

—¡No! ¡Que cosas dices! —la rubia reemplazó su nerviosismo con enojo —Solo... no te metas.

Thea salió de ahí rápidamente y divisó a Damon entre la multitud.

Lo volteó bruscamente por el hombro —Escúchame bien, Salvatore. Si no dejas a Caroline en paz pondré una estaca en tu corazón —había descubierto lo que era a base de las lagunas mentales de su amiga —A ti y a tu hermano —añadió, sabiendo que si el mayor de los hermanos era un vampiro, el menor también —Quedas advertido.

Dicho eso se fue, dejando a un fascinado Damon tras ella.

[...]

—No me quiero levantar —se quejó Thea cuando sonó la alarma.

—Tu celular sonó hace un rato, creo que si tu no te levantas mi entusiasta hermanita vendrá por ti —medio se burló.

Thea levantó su rostro de la almohada y lo miró mal —¿Tu no duermes o solo te dedicas a observarme dormir?

—Creo que no has entendido el concepto de ser un fantasma, cariño. Yo no duermo —le explicó con un deje de nostalgia, al recordar que no estaba ahí realmente.

—Parece que tengo un Edward personal —trató de bromear al ver el estado de animo de Kol —Voy a sacarte de esa caja, lo prometo —trató de poner su mano encima de la del chico, pero no se sintió nada.

La habitación se quedó en silencio.

—Sera mejor que te prepares antes de que venga  alguien a sacarte de la cama a la fuerza —Kol rompió el ambiente