Escucho Una Sinfonía | Levi Ackerman

Canción De Luna

[Levi]

Camino en círculos dentro del estudio, Hange y Mike me esperan sentados distrayendose mientras continúo m
pensando en qué más podría escribir, en cómo complementar el piano al fondo o ponerlo en el inicio.

Llevo más de una hora de esta manera y mis compañeros ya están hartos de mi, porque apenas terminamos de hacer pruebas con mi voz y loju8s violines terminaron de grabar su parte.

Pero aún no tengo clara la estructura de la canción, hemos intentado tener en claro alguna cosa pero nada me parece lo suficiente.

Después de un rato más harto de mis combinaciones extrañas, Hange y Mike se van a sus casas dejándome en el estudio.

Había estado tan absorto con mis pensamientos que ni siquiera había revisado mi celular en todo el día.

Tenía múltiples mensajes de mi padre, Mikasa y de ______.

Revisé primero el de ______ encontrando una nota de voz larga seguida de mensajes cortos.

Me dispongo a recoger todas las cosas que dejé desordenadas al rededor dejando que el audio se reproduzca a un volumen alto.

Escucho un poco de ruido sordo al inicio para después escuchar su dulce voz hablar por la bocina.

—Hola, cariño —saluda, apuesto que tiene una enorme sonrisa en su rostro—. He estado practicando las notas bajas últimamente y me gustaría que tú las escucharas. Sé que probablemente ahorita estés grabando o Hange te esté regañando, pero no importa, aquí dejaré mi audio jeje. Ah y, también aprendí a tocar un poco el ukelele así que no te burles, ¿de acuerdo?

Río ligeramente apilando los papeles en una sola fila, los acordes primeros de la canción comienzan a escucharse tiernamente por la bocina, carraspea, comenzando a cantar en un tono bajo y dulce.

—Estoy reposando sobre la luna, cariño mío, estaré ahí pronto —sus dedos se atoran un momento en los acordes de las cuerdas pero no se detiene—. Es un pacífico y estrellado lugar.

Sus vocales son un poco alargadas pero muy finas, puedo notar con claridad que ha practicado bastante.

—Es hora de envolvernos —ríe un momento aún armonizando—. En el espacio, estamos aquí, a un millón de kilómetros de distancia.

Continúo escuchándola sentandome frente de mi teléfono, acercando mi oído a la bocina, recordando todo su ser frente a mí, desde el día en que la vi en mis sueños hasta cuando le pedí ser mi pareja.

—Existen cosas que desearía saber... —verla reír a mi lado, ser quien es ella realmente— No hay ninguna cosa que te quiera ocultar...

Tal vez he fallado múltiples veces a ella en un período corto de tiempo, pero aún así ella me ha dado su completa confianza, no sé qué sería de mí si no la hubiese conocido.

—Es un oscuro y resplandeciente lugar, pero contigo, cariño —sus acordes cesan un par de segundos y escucho que sorbe un poco su nariz—. Me siento protegida y estamos a un millón de kilómetros de distancia...

El último verso lo canté con ella, como si estuviera aquí a mi lado, se que la veré en un par de días más, pero siendo apenas nueva nuestra relación se siente horrible que tengas que separarte un largo tiempo.

—Te extraño, Levi —continua ella—. Admito que tengo miedo por lo que suceda en el juicio, pero si tú estás a mi lado, se que estaré bien... —se escucha una larga pausa donde la oigo suspirar unos momentos— Espero que te haya gustado mi voz, te quiero y espero verte pronto, cariño mío.