Íbamos de regreso sobre una gran avenida, me encontraba sintiendo el aire golpear mi rostro ligeramente mientras estaba recargada en el marco de la ventana del auto.
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Estaba pensando en la revelación de Levi, ya tenía mis sospechas de que fuera él, pero el que me tuviera confianza de ello, me hizo sentir sumamente especial.
Levi sostenía mi mano ligeramente mientras seguía manejando, me encontraba pensando que podía decirle para que también viera que confío en él.
En estos momentos me está llevando a mi casa, y al estar retirada de la ciudad, podré decir algo y no solo guardar silencio el resto del camino.
Apreté su mano haciendo que me volteara a ver brevemente.
—Hay algo que debes saber —solté pesadamente—, se que puedo decírtelo y no me harás nada malo, sé que no eres como los demás.
Levi no dijo nada, solo asintió mientras desaceleraba a el carro, se orillo en un espacio que había cerca del puente donde nos encontrábamos.
—Ya puedo darte mi atención completa —dijo al fin tomando más fuerte de mi mano.
Suspiré sintiendo que explotaría mi pecho, la última vez que me abrí con alguien sobre heridas del pasado, terminó lastimándome, solo tengo miedo.
—Por favor no le digas a nadie esto —pedí mientras lo miraba a los ojos—, te lo cuento porque ahora eres mi novio.
Esa palabra se sentía extraña cuando se la decía a Levi, era diferente, todo tan repentino y tan hermoso.
Él asintió con una sonrisa sincera, y en cuanto lo hizo, todas mis dudas desaparecieron.
—Hace más de medio año que salí de una relación abusiva —solté y él se sorprendió—, te advierto que esto conmigo puede ser difícil, a veces exagero cosas y soy impredecible sobre cómo expreso mis sentimientos. Y entenderé si después de esto cambias de opinión sobre nosotros.
Hice una pausa suspirando profundamente y Levi seguía mirándome atentamente.
—Esta relación duró casi tres años, aunque lo último ya no era una relación de pareja sana. Aunque creo que nunca lo fue.
[La siguiente parte de la narración será como si _____ le contará todo a Levi, y en ocasiones se interrumpirá con preguntas de él]
Creo que desde el inicio de nuestra relación, todo estaba destinado a terminar mal.
El día que lo conocí llegó completamente drogado, habíamos estado hablando por mensaje la noche anterior, viendo que teníamos cosas en común nos quedamos de ver y me fue a dejar a la preparatoria.
—¿Tenías 18? —pregunta Levi.
Sí, había pasado casi un mes desde mi cumpleaños.
Ese mismo día me dijo que yo le había gustado mucho y quería volver a verme, al día siguiente fue a mi casa. Pero llegó tarde.
