Escucho Una Sinfonía | Levi Ackerman

Hábitos

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Con lo que pude ahorrar en los meses que trabajé decidí llevarme a mí y a mi familia a Alemania por un tiempo, no le dijimos a nadie y simplemente nos fuimos después de salir de Suiza.

Tuve que buscar un trabajo temporal como cantante de eventos pequeños como bodas y xv años, hasta ahora solo he tenido dos pero es algo. También he estado en bares nocturnos cantando peticiones, gano una miseria pero es lo único que tengo.

Después de dichos shows he bebido bastante hasta que tambaleo hasta regresar al pequeño departamento donde nos estamos quedando, quisiera que no fuera de esta manera.

Levi me ha mandado mensajes todos los días pero no soy capaz de contestar, debo de mantenerme firme para no perder la poca cordura que me queda sobre la vida, trato de encontrarle sentido a lo que hizo Levi pero simplemente no encuentro otra respuesta más que yo no soy lo que él quería desde el principio.

Me siento completamente inservible, solo necesito hacer dinero para ayudar a mi madre y Megumi, quien aún no tiene permitido trabajar. No he querido hablar de todo lo sucedido con Levi porque con tan solo pensarlo mi corazón arde y lágrimas inundan mis ojos.

Al menos puedo pagar la estadía aquí, no quiero molestar a nadie más de mi circulo cercano de amigos, sé que diré algo que no debo y todos se van a ir de mí una vez más.

Es la víspera de año nuevo y tengo un trabajo en un salón grande de fiestas, será una buena oportunidad para mí, es una buena noche para ganar dinero, además del precio de los shows me dan propina y al ser un buen salón no puedo desperdiciar esto.

Llego al lugar junto con mi madre y hermano, nos vestimos de manera elegante, traigo puesto el mismo vestido azul que use la noche que conocí a Levi, no dejo de relacionar todo con él. Tengo que concentrarme.

Sientan a mis familiares en una mesa cerca del escenario, veo como les sirven de cenar desde arriba, me acompaña una banda detrás de mí para acompañar el Jazz que cantaré.

Las luces principales se apagan dejando solo las del pequeño escenario sobre el cual estoy de pie, se escuchan los aplausos a mi al rededor. Sonrío ampliamente hacia todos lados saludando cortamente con mi muñeca.

—¡______ Fushiguro! —me presenta el animador de eventos.

[Nuevamente pueden poner la canción desde aquí y todo será como si _____ cantara todo en inglés]

Los aplausos cesan, una luz me alumbra completamente desde arriba y el tintineo del piano comienza a sonar mientras tarareo en conjunto a la canción y bailo al ritmo.

Esta última semana ha sido la peor de toda mi vida, pensé que finalmente había encontrado al chico de mis sueños que sería honesto conmigo y no me traicionaría, parece que me equivoqué vilmente pues compito contra la prometida de mi padre por quien nos abandonó.

—Ceno en la bañera, después voy a los clubs de sexo viendo a gente rara intentando ligar —intento armonizar lo mejor que puedo— Eso no me pone nerviosa, sin embargo me pone inquieta. Sí, ya he estado por aquí y he visto todo.

Continúo cantando la canción sin sentido que espero que nadie de aquí sepa un inglés fluido pero escogí esta porque ha sido la más fácil de practicar en tan poco tiempo para prepararme y cantar Jazz el día de hoy, toda la gente presente parece ser muy importante por aquí, cargan con bastones de oro y relojes que valen más que mi país. 

Siempre me encuentro en lugares donde no pertenezco.

—Me he tomado todo mi dinero y sabía un poco a soledad —pauso un segundo—.Te has ido y tengo que estar drogada, todo el tiempo, para mantenerte fuera de mi mente